![Los transportistas de coches dan la alarma ante su situación «desesperada»](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202108/30/media/cortadas/reuters-ford-U14743000827gHq-624x385.jpg)
![Los transportistas de coches dan la alarma ante su situación «desesperada»](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202108/30/media/cortadas/reuters-ford-U14743000827gHq-624x385.jpg)
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Unai Mezcua
Martes, 31 de agosto 2021, 01:30
Los continuos paros en las factorías automovilísticas por la falta de chips pasan factura a los sectores auxiliares. Un ejemplo son transportistas portavehículos, que advierten de que las continuas interrupciones en la fabricación les están empujando a una situación de inactividad, que afrontan «con enorme preocupación y desesperación».
Fabricantes como Seat en Martorell, Mercedes en Vitoria, Renault en Valladolid o Stellantis en Vigo y Zaragoza han tenido que realizar parones en sus líneas de montaje. Una situación que se empezó a dejar notar el pasado mes de diciembre. Desde entonces se han dejado de fabricar cerca de 300.000 coches en España. Según un reciente informe de IHS Markit, la carestía puede hacer que se dejen de producir hasta 7,1 millones de unidades en todo el mundo este año.
«La situación de los transportistas portavehículos es dramática», advierten desde Fenadismer, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España. En España hay unas mil empresas y autónomos, con una flota de camiones de unos 3.900 vehículos. Su situación se ve además agravada por la caída de la actividad sufrida el año pasado por la pandemia de coronavirus, y por la imposibilidad de adaptar sus vehículos a otro tipo de transporte que no sea el de vehículos.
Además, los transportistas de automóviles afrontan unos costes operativos mayores que la media. Según el Observatorio de Costes del Transporte de Mercancías Por Carretera que publica periódicamente el Ministerio de Transportes, la adquisición de los vehículos necesarios para su actividad supera de media los 200.000 euros, un 50% más que un tren de carretera convencional.
Transportave, la asociación sectorial federada en Fenadismer que agrupa a este tipo de empresas, celebrará en septiembre una asamblea para analizar la situación del sector y buscar líneas de actuación. Los transportistas culpan además a otras causas, aparte de la escasez de componentes eléctricos. «Detrás de esta actuación podría haber otros intereses económicos o estratégicos que estarían motivando la ralentización en la producción de nuevos vehículos», dicen.
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