La policía realiza un control policial JM RODRIGUEZ

La multa que te puede poner la DGT en los días de mucho frío

Con el descenso de las temperaturas en esta época del año aumentan las sanciones por este motivo

DM

Domingo, 18 de diciembre 2022, 09:00

Llegan el invierno, descienden las temperaturas y la tendencia del conductor es la dejarse el abrigo puesto y en ocasiones incluso llegar a conducir con guantes puestos a pesar de conocer las recomendaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT). Pero, ¿es igual de peligroso conducir con estos últimos puestos?

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La DGT da una serie de consejos para los meses más fríos del año: arrancar el coche y esperar a que coja temperatura para encender la calefacción y conseguir alcanzar una temperatura adecuada en el interior del vehículo.

Si nos enfocamos en los reglamentos que regulan la conducción, no hay ninguna norma como tal que prohíba conducir con guantes porque técnicamente no es una infracción. Sin embargo, todo depende de la interpretación de los agentes de tráfico, que pueden considerar que este accesorio nos impide controlar correctamente el vehículo.

Un argumento perfectamente válido si lo basan concretamente en tres artículos, que explicamos a continuación, y argumentan que conducir con guantes nos impide agarrar el volante con firmeza y seguridad.

En este sentido, conducir con guantes puede suponer una multa de hasta 200 euros si las autoridades consideran que ha habido negligencia por nuestra parte, ya que esta, es una infracción grave.

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Todo ello depende de la razón que aporten los agentes de Tráfico. Para ello, pueden hacerlo basándose en tres artículos del Reglamento General de Conductores (RGC):

Artículo 3: todos los conductores deben conducir con la diligencia y la precaución necesarias para evitar todo daño (propio o ajeno).

Artículo 17: el conductor tiene que estar, siempre, en condiciones de controlar el vehículo.

Artículo 18: el conductor debe mantener la libertad de movimientos y debe poder conducir con la posición adecuada para garantizar su capacidad de reacción y la seguridad de todos.

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Conducir con guantes entraría en conflicto con todos ellos. No obstante, si se llevan unos específicos para ello, diseñados para funcionar como una segunda piel y cuyo objetivo es garantizar la sensibilidad y buen agarre del volante, no habrá problema.

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