Quedan cuatro partidos

Y así llegamos al sorteo. Todo el mundo quería una sola cosa como prioridad: jugar en Mestalla. Deseo cumplido. Pero, por si fuera poco, el caprichoso destino quiso que el rival en casa fuera el que más cerca está del descenso de todos los del bombo. No me digan que el Valencia no ha tenido suerte. Fíjense lo que les digo: yo creo que si me dan a elegir, entre otra eliminatoria fuera en casa de Unionistas o Tenerife y el Celta en Mestalla, igual elijo jugar en casa ante un Primera que se juega la vida en Liga antes que un rival de inferior categoría en su estadio. ¿No les pasa lo mismo? El Valencia en Mestalla es uno de los mejores equipos de la Liga: compite bien, es agresivo, corre y pelea con la adrenalina que le regala una grada llena hasta la bandera. Imagínense como será lo del miércoles 17: otra caldera memorable. Este Valencia y este torneo enganchan. Es, permítanme repetirlo, el torneo del año para el Valencia.

Y para los que recelan de apostar todo a la Copa como prioridad absoluta, estando la Liga de por medio, algunos datos irrefutables. Los de Baraja están a cuatro partidos de otra final, de los cuales dos seguro son en Mestalla y un tercero -el de cuartos- también podría serlo. Ni adrede mejor. Le ha tocado un equipo que está ahogado por el descenso y que no puede permitirse el lujo de jugarse a los titulares en Copa. Y priorizar la Copa tiene -a priori- coste en la Liga durante un mes de competición. Es decir, que entre elegir Copa un mes y resto de la Liga de febrero a junio, ¿se puede tener alguna duda de cuál debe ser la apuesta a cuatro partidos de una final? Yo es que enloquezco ante la duda del que la tenga. Si este mes la Copa perjudica al Valencia en Liga hay 4 meses y 11 puntos de ventaja para que nadie se ponga nervioso. Pero cuando caigas en Copa se acabó. Ni final, ni posible título, ni Europa si ganas la final... ni nada.

Y ahora Cádiz. El día que en el que se puede decir adiós definitivo al descenso porque ganar supondría tener quince puntos de ventaja sobre el primero de los que bajaría: catorce más el average particular. Empatar lo dejaría en once más uno. Y solo perder haría mirar con cierto recelo todavía al descenso. Ganar ayudaría sin duda a ir a por la Copa de verdad y perder generaría alguna duda entre los escépticos (que aún los hay). Pero, para mí, no hay debate. Ganar 4 partidos de 19 en Liga en muy sencillo. Ganar un título está muy jodido para este club por culpa de Lim. El sorteo te ha invitado a apostar. No demos la espalda a la suerte.