Seis rincones imperdibles para hacer snorkel en la Comunitat Valenciana

La Comunitat Valenciana ofrece multitud de paisajes increíbles y únicos para poder realizar actividades de buceo en el Mar Mediterráneo, desde el norte hasta el sur de la región. Aunque las posibilidades son infinitas, aquí te dejamos un listado con seis de los mejores rincones para hacer snorkel cerca de Valencia.

Tabarca es la única isla que a día de hoy está habitada en toda la Comunitat Valenciana y la más pequeña que alberga población de toda España. En la provincia de Alicante, se encuentra situada frente a la costa de Santa Pola y posee una longitud de unos dos kilómetros aproximadamente.

Más allá de su riqueza cultural e histórica debido a que fue refugio de piratas hasta finales del siglo XVIII, la isla destaca por sus cualidades para realizar snorkel. Gracias a sus aguas cristalinas se puede ver la diversidad de especies que habitan allí, como las praderas de posidonia.

Una de las rutas más conocidas es la que comienza en la cala rocosa situada bajo la iglesia y sigue toda la línea de la costa para finalizar en los pies de la muralla de la iglesia. A lo largo del recorrido se podrá ver una majestuosa pradera de Posidonia Oceánica, que acoge a más de 300 especies de flora y 1000 especies de fauna.

En el municipio de Pilar de la Horadada, situado al sur de Alicante y que limita con la Región de Murcia, existe la posibilidad de realizar una ruta de snorkel tan sorprendente como bonita. Se trata de un recorrido que discurre por las Canteras Romanas que sirvieron como fuente de materiales para la construcción de la Torre de la Horadada, que se levantó en el siglo XVI gracias a la roca arenisca que se extrajo de las canteras.

Una posible ruta es la circular que da comienzo en la playa de Mil Palmeras, más concretamente en el extremo sur. Desde ahí se inicia un camino hacia el sur, a lo largo del cual poder admirar un fondo marino muy variado de roca, pradera, arena y secos. Al final del todo se encontrará una pequeña punta de piedras, y ese será el punto de retorno para volver desde donde se empezó. En el recorrido se encontrarán arenales y pequeños mechones de Posidonia y Caulerpa.

Esta pequeña cala está situada en el término municipal de Benissa, en la provincia de Alicante. La ubicación es idílica, con vistas al Peñón de Ifach de fondo, y sus aguas turquesas invitan a pegarse un buen chapuzón y, como no, a bucear y descubrir todas las posibilidades que ofrece el mar.

Acceder a la zona de snorkel es bien sencillo: se dispone de unas escaleras de madera que conducen directamente al agua, por lo que no hay que complicarse andando entre rocas (aunque se recomienda llevar escarpines por si en algún momento fuera necesario caminar por las piedras).

Gracias a un espigón que se construyó de manera artificial, el mar está casi siempre en calma, por lo que es un lugar seguro para que los más pequeños puedan practicar snorkel también.

Sin embargo, para quienes quieran arriesgar algo más existe un camino que comienza dirigiéndose hacia la izquierda de las escaleras, donde poco a poco se irá cogiendo profundidad e iremos encontrando rocas de un tamaño ya considerable. A partir de ese momento se empezarán a avistar praderas de posidonia y conforme más nos acerquemos a la Cala Baladrar (situada justo al lado), encontraremos más recovecos que albergan infinidad de especies marinas.

Desde Alicante saltamos directamente a Castellón para dirigirnos a las Islas Columbretes, un archipiélago compuesto por pequeñas islas de origen volcánico y que se sitúan a 49 kilómetros de la costa, concretamente de Oropesa del Mar.

El acceso a este paraje para realizar snorkel no resulta tan sencillo, puesto que sí o sí hay que hacerlo a través de alguna embarcación. Sin embargo, existen multitud de empresas que ofrecen paquetes turísticos en los que poder bucear por sus aguas. Hay que tener en cuenta que las actividades de buceo están reguladas en las Islas Columbretes, por lo que no se pueden practicar de manera libre, sino que siempre hay que ir con un grupo organizado.

Así, los puntos de partida para llegar hasta el archipiélago se sitúan en distintos sitios, como Castellón, Alcocebre u Oropesa. Una vez allí, conviene seguir siempre las recomendaciones y advertencias de los guías que nos acompañen. La inmersión en estas islas declaradas Parque Natural y Reserva Marina nos permitirá ver fondos tapizados por jardines de fanerógamas, algas pardas y bosques de laminarias poco frecuentes en otras partes del Mediterráneo. Si continuamos bajando todavía más, encontraremos colonias de gorgonias y algo de coral rojo, al tiempo que compartimos espacio con multitud de especies de peces como meros, salmonetes o sardinas, entre muchas otras.

Esta es, sin duda, una excursión que merece la pena si se quiere descubrir un lugar nuevo de la Comunitat y practicar un deporte distinto.

Esta 'isla' situada en El Campello (Alicante) es una zona de baño que rodea el Yacimiento Arqueológico de la Illeta dels Banyets. Se trata de una antigua península que se separó del resto de territorio a causa de un terremoto y que en 1943 se volvió a unir formando un espigón natural.

La ruta de snorkel es un recorrido alrededor del yacimiento arqueológico y comienza desde una pequeña playa situada al sur del istmo. Al sumergirnos encontraremos primero un fondo de arena de poca profundidad en el que habitan moluscos y otros peces. Si seguimos, llegaremos hasta unos fondos rocosos tapizados donde podremos ver erizos o tordos, y si buceamos más lejos de la pared avistamos una inmensa pradera de Posidonia Oceánica.

Si se quiere, existe la posibilidad de realizar la ruta con una audioguía. Esta es una buena opción para ir escuchando las explicaciones y las curiosidades de los ecosistemas de este paraje del Mar Mediterráneo.

En la Cala del Moraig de Benitatxell (Alicante) se encuentra uno de los principales reclamos turísticos de la Comunitat Valenciana. Se trata de la Cova dels Arcs (Cueva de los Arcos), una oquedad que el mar ha ido creando lentamente con el paso del tiempo gracias a las características del terreno cárstico. Cuando el mar está en calma, se puede ver el sol brillar a través de sus arcos.

Las condiciones de la cueva hacen que el buceo sea accesible para snorkelers menos experimentados, aunque hay que prestar especial atención a las rocas. Además, se recomienda no realizar inmersiones cuando la mar está brava, debido precisamente al peligro que puede haber con las rocas.

Mientras buceamos podremos encontrar una gran variedad de especies marinas, como pulpos, sepias, morenas y diversos tipos de peces. Sin duda, esta excursión es una visita obligatoria para los amantes del snorkel.