Los bous, una 'cogida' para el PSPV

Toros sí o toros no. Fiesta tradicional o maltrato animal. El debate entre los defensores de la corridas de toros y el resto de celebraciones populares con estos animales y quienes consideran que se trata de un ejemplo evidente de crueldad es un hecho en la sociedad española. La izquierda política tiende, salvo excepciones puntuales, a marcar distancia con la tauromaquia, de la misma manera que la derecha se siente cómoda en la defensa de estos festejos. Vicente Barrera es matador de toros y vicepresidente del Consell a propuesta de Vox.

En el socialismo valenciano conviven las dos posturas, la que se declara abiertamente en contra de esto tipo de celebraciones y la que las rechaza por considerarlas un ejemplo de maltrato animal injustificable. Así como en Compromís la posición oficial es de rechazo a los toros –aunque en algunos municipios que ha gobernado este partido como Chiva se han mantenido estas celebraciones con amplio arraigo–, el socialismo valenciano ha venido tratando de mantener una posición más ambigua, poco menos que partidaria de que cada municipio hiciera lo que considerara oportuno.

En el caso de las pedanías de Valencia, por ejemplo, donde el Gobierno de María José Catalá ha revocado la prohibición dels bous al carrer, tanto la líder del PSPV local, Sandra Gómez, como su número dos, Borja Sanjuan, se han pronunciado en términos muy contundentes en contra de estas celebraciones. Esta medida –dijo Gómez– «nos hace ser peores como sociedad, peores como ciudad y sobre todo a María José Catalá peor como alcaldesa», al convertir a Valencia en una ciudad «más cruel». A Catalá «le ha faltado valentía para defender los derechos de los animales con el bou embolat», aseguraba este domingo Sanjuan tras el regreso de estos festejos a Carpesa.

La posición de los socialistas de la ciudad de Valencia se suma a otras como la del exdiputado autonómico del PSPV, David Calvo, que en las últimas semanas viene haciéndose eco de cogidas e incidentes en distintas celebraciones taurinas, en su mayoría de la Comunitat. Este mismo domingo, Calvo se refería a una imagen publicada en este diario de los festejos celebrados en Carpesa el fin de semana.

Pero, como siempre en la vida, hay excepciones. Las críticas hacia los festejos taurinos por parte de dirigentes socialistas contrastan con cargos de ese partido a los que se suele ver disfrutar con cierta frecuencia de este tipo de celebraciones. El expresidente de la Diputación Toni Gaspar, el exministro José Luis Ábalos o el exsecretario autonómico de Emergencias José María Ángel son tradicionales aficionados a estos festejos.

Al que se pudo ver el sábado por la noche, en Carpesa es al secretario del PSPV de la provincia de Valencia, Carlos Fernández Bielsa. Al dirigente socialista, reconocido por algunos de los asistentes, se le pudo ver junto a Carlos Casilda, secretario de la federación de bous al carrer, y a German Zaragozá, presidente de la misma federación.

Bielsa no ha sido tradicionalmente uno de los dirigentes de su partido más críticos con este tipo de festejos, aunque tampoco se ha retratado como un aficionado más en la plaza. En Mislata, la localidad de la que Bielsa es alcalde desde 2011, hay varias peñas taurinas y cierta tradición hacia este tipo de festejos. Pero la presencia del también líder provincial en los de Carpesa, precisamente después de las críticas que la dirección de su partido en la ciudad de Valencia había dirigido hacia la alcaldesa Catalá por levantar esa prohibición no deja de ser llamativa.

Preguntado por su presencia en Carpesa, el entorno del líder provincial explicó que en 2022 ya acudió a las fiestas de la localidad tras ser invitado por un amigo personal que es presidente de la peña taurina y que este 2023 hizo los mismo. «Y sobre la política de oposición en Valencia ciudad nada que decir», sentenció la misma fuente.

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