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burguera y maría eugeniA alonso
Valencia | Madrid
Domingo, 11 de abril 2021
En un mes, Toni Cantó ha experimentado en carne propia una de esas míticas frases de los textos de Shakespeare que en su día representó sobre las tablas de los teatros. Cantó ha pasado de ser a no ser. Era portavoz de Ciudadanos en Les Corts. El 15 de marzo anunció que lo dejaría de ser y que estaba «desilusionado de la política». Iba a ser de nuevo actor, según dijo. El 22 de marzo se empadronó en Madrid, y asegura que ese fulminante cambio se debía a que retomaba así su carrera como intérprete. El 24 de marzo, el PP anuncia el fichaje de Toni Cantó para la candidatura autonómica como independiente en la lista de Madrid. El 26 de marzo se supo que iría de número 5 por la lista liderada por Ayuso. Era candidato. Ayer dejó de serlo. La Justicia ha considerado que su inclusión en las listas es ilegal por no estar censado en tiempo y forma.
De lo que decida en los próximos días el Tribunal Constitucional dependerá que Toni Cantó vea truncado o no sus planes de ir en la lista electoral del PP de Madrid que encabeza Isabel Díaz Ayuso.
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Los populares anunciaron ayer que recurrirán ante el TC la sentencia del juzgado de lo contencioso-administrativo número cinco de Madrid que anula la inclusión del exdirigente de Ciudadanos y también del exalcalde de Toledo, Agustín Conde, de su candidatura para el 4 de mayo. La justicia consideró que ambos son «inelegibles» por no haberse empadronado en esta comunidad antes del 1 de enero de 2021, como marca la ley electoral vigente y como había denunciado el PSOE.
Apenas unos días después de que conocerse el adelanto electoral en Madrid (fruto de la fracasada moción de censura de PSOE y Ciudadanos en Murcia), Cantó daba un portazo a la formación naranja. No hace ni un mes de todo eso. De síndic de Ciudadanos pasó de actor en busca de empleo, candidato del PP y no candidato.
Pese a las denuncias iniciales de la izquierda por considerar que no cumplía los requisitos, la Junta Electoral Provincial de Madrid avaló su candidatura y la de Conde, mano derecha de Dolores de Cospedal en el Ministerio de Defensa. El ente que fiscaliza las elecciones dio su visto bueno al comprobar que la dirección que constaba en sus respectivos DNI era de Madrid, pero sin llegar a comprobar el padrón. Los socialistas solicitaron acceder al expediente de ambos y comprobaron que sus documentos de identidad habían sido expedidos a finales de marzo.
La sentencia reconoce que tanto Cantó como Conde «ostentan actualmente la condición de ciudadanos de la Comunidad de Madrid» pero cambiaron sus domicilios una vez cerrado el censo electoral, lo que implica que «no ostentarían, en modo alguno, la condición de elector, que es un requisito, insoslayable para poder concurrir a las elecciones como candidato».
El juez fundamenta su decisión en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General que prohíbe ser candidato a quienes efectúen un cambio de residencia desde una circunscripción electoral a otra diferente en fecha posterior al cierre del censo.
La decisión judicial supone un revés para la candidatura de Díaz Ayuso, pero también para la dirección nacional del PP, que buscaba dar un golpe de efecto con Cantó para escenificar la reunificación del centroderecha y la absorción de dirigentes de Ciudadanos. Su inclusión en los puestos de salida -ocupa el quinto lugar, o quizá sólo lo ocupaba-, produjo incluso un choque entre Pablo Casado y la presidente madrileña, reacia al fichaje y que no quería colocar en su lista al exportavoz de los Ciudadanos Les Corts por encima de sus consejeros. El líder del PP impuso su criterio.
Tras conocer la sentencia, desde la dirección popular anunciaron el recurso ante e Constitucional y señalaron que el PSOE «está desesperado» y «quiere ganar en los tribunales lo que las urnas le van a negar». Los socialistas afirman que sus razones han sido atendidas porque «la ley es clara y la libertad no es saltarse la democracia y la ley». «Ante eso no hay recurso que valga», señalaron desde la candidatura de Ángel Gabilondo.
Toni Cantó
Burguera .
M. Hortelano
El propio Cantó denunció que los socialistas ya intentaron «que los madrileños no votaran este 4-M» al presentar una moción de censura que paralizara la convocatoria de elecciones en Madrid y ha criticado que ahora traten de excluirle. «Mi compromiso es por la libertad. Esté en la lista o no, me dejaré hasta el último aliento. Ahora más que nunca», escribió en Twitter. El actor y político concedió una entrevista en La Sexta donde restó importancia a su exclusión de la lista. «Me sorprende que alguien que lleva más de la mitad de su vida en Madrid no pueda presentarse a las elecciones de Madrid», indicó Cantó, para quien su situación «no es lo importante, porque yo voy a seguir en campaña e intentar que no prospere lo que intentaron, primero en Murcia, y ahora queriendo boicotear una lista. Pero voy a seguir haciendo campaña».
El exsíndic de Ciudadanos en la Comunitat negó que la sentencia «sea un revés judicial. Esta tarde tenía en mis planes acudir a un mitin y seguiré acudiendo. Soy actor y nunca he sabido lo que iba a ser de mi vida un mes más tarde. No tengo ninguna preocupación», y frente a los comentarios irónicos desde el resto de partidos, incluido el que fue suyo hasta el 15 de marzo, señaló que «si Ciudadanos se alegra por esto me da muchísima pena por ellos». Podemos tiró de ironía para recordar el pasado de actor del exdirigente de Ciudadanos y aseguró que lo de Cantó en el PP «ha pasado de ser un papelón a un simple cameo».
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