Catalá y España, el otro duelo del morbo en las autonómicas del 28-M

Por primera vez ninguno de los candidatos a la presidencia de la Generalitat de los dos grandes partidos encabeza la lista de la circunscripción de Valencia –Ximo Puig volverá a presentarse por Castellón y Carlos Mazón ya ha anunciado que lo hará por Alicante-. De manera que el duelo de los dos números uno por Valencia tiene un significado especial: el otro gran duelo entre populares y socialistas se librará en la principal circunscripción, por tamaño, de la Comunitat.

María José Catalá es la número dos de Mazón en el PP valenciano. Arcadi España no ocupa el número dos en el organigrama de su partido aunque está considerado como una de las voces que Puig tiene en cuenta a la hora de tomar decisiones.

Catalá es la secretaria general de los populares de la Comunitat. El ticket que forma junto a Mazón constituye la gran apuesta de su partido para recuperar la hegemonía electoral en la Comunitat. Brillante en la oratoria, política hábil, algunos sondeos le sitúan con muchas posibilidades de desbancar a Joan Ribó de la alcaldía. De conseguirlo, qué duda cabe, supondría el mayor éxito político de su carrera. No sólo por recuperar la vara de mando que dejó Rita Barberá en 2015. También porque todo el PP asume la trascendencia de recuperar este gobierno municipal, como palanca para alcanzar la Generalitat e incluso la Moncloa con Alberto Núñez Feijóo.

Arcadi España es miembro de la ejecutiva federal del PSOE, ha sido jefe de gabinete de Puig y ocupa la decisiva conselleria de Hacienda desde la marcha de Vicent Soler, después de haber pasado por la de Territorio. De carácter tranquilo y reflexivo, su criterio e influencia en la sala de máquinas del Palau contrasta con su escaso anclaje con el aparato del partido.

Puig cuenta con reiteración con su hombre de confianza para cualquier vacante o cargo que se produce en su área de influencia. Su nombre sonó para delegado del Gobierno cuando el Ejecutivo decidió prescindir de Gloria Calero, pero también cuando dejó el cargo Juan Carlos Fulgencio. Puig lo propuso para la ejecutiva federal del PSOE –es el secretario de Transportes- y ahora se da por hecha su condición de cabeza de lista por Valencia, pese a ser la primera vez que concurre a una cita electoral.

Catalá es la llave con la que Mazón aspira a alcanzar la presidencia de la Generalitat. Las encuestas que manejan los populares pronostican un muy buen resultado en la circunscripción de Alicante. En Valencia, con el factor Compromís como principal diferencia, los populares saben que obtener un buen resultado en la capital debe de compensar la fortaleza de los socialistas en el área metropolitana.

¿Y el día después? Catalá aspira a recuperar la alcaldía de Valencia para el PP. Si lo logra y alcanza la vara de mando de la tercera capital de España, su influencia y peso específico en el partido se disparará. Arcadi España cuenta con el triunfo de Puig para mantener el protagonismo político del que ahora dispone en su partido.