El Consell califica de «sainete» la guerra del PP: «Es una transmisión generacional de la corrupción»

La vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, ha calificado como un «sainete» la situación en la que se encuentra el PP. Oltra, que en sus comparecencias tras los plenos del Gobierno valenciano suele mostrarse reacia a comentar cuestiones y declaraciones de los partidos políticos (es un principio que en realidad emplea de manera discrecional, especialmente cuando afecta a discrepancias entre los partidos del Botánico), ha dicho inicialmente que no iba a valorar el choque entre Génova y Díaz Ayuso. Sin embargo, posteriormente ha calificado esta situación de «sainete» provocado por una «transmisión generacional de la corrupción».

Oltra ha evitado comentar una sentencia que afecta a su departamento (el auto del TSJCV que anula la multa a un centro de menores de Segorbe) recordando que no dispone de la sentencia y que, según señaló un día antes, no puede «hacer una valoración mínimamente rigurosa» por no tener «acceso al texto, a la fuente». Sin embargo, sí ha tenido capacidad para mostrarse «perpleja y desolada» por el presunto cobro de comisiones en un contrato de emergencia para la compra de mascarillas vinculado al hermano de Ayuso al inicio de la pandemia. «¿He de recordar cómo estábamos en abril de 2020?», se ha preguntado.

La vicepresidenta afirma asistir con «estupefacción» a la información vinculada al choque entre Génova y Ayuso. La portavoz del Consell advierte que un gobierno debe centrarse siempre en los ciudadanos, sobre todo los más vulnerables, y «parece que en otros lugares no es la prioridad». En este sentido, ha empezado su comentario asegurando que el Ejecutivo valenciano está «con la cabeza en la faena» y «tomando decisiones difíciles para preservar vidas», y entiene que ese no es el «modus operandi» en el PP, donde «te afilias y ya te enseñan esto, que se cobran comisiones para adquirir mascarillas en abril de 2020», al inicio de la pandemia, con todo el país buscando material de protección para los sanitarios. Oltra ha asociado la situación a «cuando (Rafael) Blasco (exconseller de Cooperación con el PP) robaba dinero a los niños con sida en África o las víctimas del terremoto en Haití».

«¿No harían falta mascarillas en abril de 2020 en las residencias, sobre todo en las de Madrid?», ha preguntado Oltra, tras lo que ha vuelto a mostrarse «perpleja y ciertamente desolada porque esto alimenta un marco muy peligroso para la democracia». A su juicio, la situación genera un marco donde «la gente rechaza la política» cuando es la línea de defensa de la gente, sobre todo la más vulnerable. «Vulnerable», ha subrayado, «ya sea por una pandemia, por desigualdades económicas, por pertenecer a un colectivo minorizado o por cuestión de género. La política es la línea de defensa de la gente y no puede dar estos espectáculos. Lo más grave de todo es que el dinero público es sagrado».

La vicepresidenta señaló que «solo pensar que lo que se está publicando es cierto, que hubo una comisión para comprar mascarillas», le causa «una desolación y una tristeza infinita».

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