La estrategia de Sumar en la Comunitat eleva la tensión interna en Compromís

«El votante de EU y el de Podemos existe. No fueron a votar las últimas veces pero están ahí y no nos votarán a nosotros. Sumar quizá les motive, porque con nuestras fuerzas y con las del PSPV no nos llega», analizan fuentes de Més, el antiguo Bloc. «El espacio electoral está ahí. Las personas que apoyaron a Podemos e IU necesitan votar a alguien y no será a los nacionalistas, porque entre sus prioridades no está la defensa constante del valenciano», coincide un destacado dirigente de Iniciativa.

La dirección de Més está molesta con la cúpula de Sumar, donde la hoja de ruta parece ya bastante clara al margen de que le guste a los nacionalistas más o menos. En declaraciones a la Cadena Ser, el diputado de Sumar por Alicante Txema Guijarro señaló que «respetando y ampliando» los acuerdos con la coalición valenciana, la plataforma que lidera Díaz considera que en la Comunitat «hay un espacio que lidera Compromís y nuestra intención es crear un espacio aún más grande y confluir ganando peso específico».

También en La Ser, Amparo Piquer, la secretaria general de Més advirtió ayer de que «no es conveniente ni necesario que se implante otra fuerza en el País Valencià, porque aquí ya está Compromís quien representa el valencianismo, la izquierda y la apuesta verde. Tenemos un acuerdo con Sumar para no ejercer como competencia electoral».

En el antiguo Bloc, la presencia de Sumar no sólo supone una molestia para captar el voto de Podemos y EU. El problema de Més es que, actualmente, su mayoría interna en Compromís y la ausencia en Iniciativa de una figura del tirón electoral de Oltra le permite actuar sin demasiadas contemplaciones a la hora de ocupar los cargos públicos. Hace un mes se firmó la paz entre Més e Iniciativa después de tres meses de ruptura de las relaciones orgánicas. En el partido fundado por Oltra y Pasqual Mollà consideraban que los nacionalistas habían acaparado los cargos públicos tras la derrota electoral.

La implantación en la Comunitat de Sumar supone, pues, una amenaza para Més. Da a Iniciativa de un plan B. Si los nacionalistas no dan cancha al que fuera el partido de Oltra, la alternativa de Sumar propiciaría una escisión que aislaría a los nacionalistas.

En Més pretenden esquivar aquellos tiempos en que Morera, al frente del Bloc, se quedaba rozando la posibilidad de entrar en Les Corts, pero no entraba. Sin Sumar, en Compromís no hay división posible, pero con Sumar en la Comunitat, las posibilidades de alianzas electorales a la izquierda del PSPV se multiplican y los nacionalistas ven erosionado su protagonismo.