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Marcos Benavent, en el exterior de la Ciudad de la Justicia. Damián Torres

La Fiscalía estudia si pide ya el ingreso en prisión de Benavent por el saqueo de Imelsa

El ministerio público solicita esta medida cautelar en condenas superiores a los seis años y donde aprecia riesgo de fuga

A. Rallo

Valencia

Miércoles, 25 de enero 2023, 00:43

Marcos Benavent ha sido condenado a siete años y diez meses de prisión. Su socio en Thematica, la mercantil que utilizaron para saquear Imelsa, era Rafael García Barat quien afronta incluso un mayor tiempo privado de libertad. La Audiencia le ha impuesto nueve años ... de cárcel. Son penas suficientemente elevadas para considerar el supuesto de una eventual huida con la que evitar la acción de la Justicia.

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La Fiscalía estudia ya si pide el ingreso en prisión de Benavent y Barat pese a que la sentencia no es firme y será recurrida, sin duda, ante el Tribunal Supremo. Pero se trata de una pena superior a los seis años de cárcel, criterio que suele emplear la Fiscalía a la hora de dar el paso de solicitar esta medida excepcional. El ministerio público, no obstante, no ha adoptado ninguna decisión.

En el supuesto de que pida el ingreso inmediato, la Sala celebra una vista con presencia del condenado donde se debe valorar el riesgo de fuga, factor fundamental en este tipo de peticiones. Benavent ya huyó al inicio de la causa, cuando las diligencias estaban aún secretas, y pasó cerca de tres meses por diferentes países de Europa y Asia.

También es cierto que regresó por su propia voluntad e inició una masiva confesión que, de momento, ya ha sentado a más de 30 personas en el banquillo, algunas con severas condenas. En este sentido, la prisión provisional es una medida cautelar para evitar la fuga.

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Los tribunales son reacios a conceder estas medidas en asuntos de esta naturaleza, es decir, relacionados con la corrupción. Hay varios antecedentes en la historia más reciente de la Comunitat. Uno de los más relevantes fue el caso Emarsa. La Fiscalía reclamó prisión para los principales cabecillas de la red, cuyas penas se disparaban incluso por encima de los diez años. Pero el tribunal lo denegó. No ingresaron hasta la confirmación por parte del Tribunal Supremo.

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