REDACCIÓN
Miércoles, 30 de octubre 2019, 11:55
El concejal Pere Fuset ha recurrido el auto de procesamiento, la resolución del juez que le deja a un paso del banquillo por el accidente mortal en el montaje de las gradas de Viveros. El edil argumenta en un escrito la nulidad de la resolución porque todavía faltan por practicar algunas pruebas que solicitó el concejal y que el juzgado nunca llegó a autorizar. Considera que es básico contar con esa información antes de cerrar la instrucción. Entre estas diligencias, estaría la declaración como testigo de Andreu Mezquida.
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Al margen, insiste el edil en que no existen indicios de que cometiera ningún delito. En la resolución, adelantada por el diario Levante, hace especial hincapié en la carta que según el auto firmó de su puño y letra y niega que lo sea. Es más, apunta que fue redactada por un técnico de servicio y que, en cualquier caso, el tono era cordial y no exigía premura en el montaje del graderío, infraestructura en la que perdió la vida el operario. Por otro lado, además, recuerda que la autorización del uso del dominio público a los organizadores del evento fue firmada por el concejal de Comercio, Carlos Galiana.
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L. SORIANO / A. RALLO
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