La guerra continúa en el PSPV: el pulso en Valencia se traslada a la dirección provincial

El pacto entre los dos candidatos, avalado por la secretaria general Diana Morant, desbloqueó la proclamación de Bielsa. Pero no ha resuelto ni mucho menos la división en el PSPV de la provincia de Valencia. Lo ajustado del resultado, la diferencia en términos porcentuales es de unas pocas centésimas, convierte el congreso provincial previsto para el segundo fin de semana de abril en una suerte de segunda vuelta de las primarias.

Ese congreso, sin una ubicación aun definida aunque parece poco probable que sea en Valencia ciudad, debe elegir y votar la composición de la nueva ejecutiva provincial, además del resto de órganos de control y dirección del partido. La ejecutiva la encabezará Bielsa –eso no está en duda–. Pero su composición determinará el grado de integración de los perdedores en las primarias, el aparato del partido sumado a los pelayos, la FSP, el Socialistes 3.0...

El resultado oficial de la votación proclamado por el comissió d 'Ètica del PSPV fue de 3.412 votos para Bielsa (49,86%) y 3.391 para Raga (49,55%). Los afines a Morant, volcados (sin éxito) en la victoria de Raga, reclaman una integración en la nueva ejecutiva si no equivalente, sí al menos similar a ese resultado. «Al menos un 40%» señala uno de los referentes locales que mostró su respaldo a Raga. El porcentaje de representación en la dirección provincial puede ser más o menos discutible. Lo que lo es menos es que ese porcentaje venga además acompañado de algún puesto que dé cierta visibilidad política a esa mitad del partido que apoyó a Raga. Se asume que la secretaría de Organización debe de ser ocupada por una persona cercana al secretario general, pero sí se considera que responsabilidades como la presidencia del partido –aunque tenga un carácter honorífico–, o alguna vicesecretaría, en el caso de que el líder provincial diseñe un equipo con varias de ellas, representarían el mínimo de integración que se pactó en aquella reunión con Morant.

Hasta la fecha, el entorno de Bielsa ha venido negando que de aquel encuentro se concluyera acuerdo alguno –en términos de porcentaje– sobre esa integración que el líder provincial asegura tener disposición a hacer. Bielsa pretende hacer su equipo, pero está dispuesto a contar con referentes y cargos de entre quienes apoyaron a Raga. La duda es en qué términos.

Y más todavía. En el congreso provincial tocará elegir no sólo a la nueva dirección, sino también al comité provincial. El aparato afín a Morant considera que, en este órgano –máximo órgano del partido entre congresos– sí que debe de visibilizarse esos porcentajes prácticamente idénticos del resultado de las primarias. En caso contrario, se advierte, se optará por presentar una candidatura alternativa a la avalada por Bielsa. «Y a votar», se remarca.

La eventual falta de acuerdo sobre el comité provincial y sobre la composición de la nueva ejecutiva pueden dibujar un congreso de choque. La ejecutiva de Bielsa tendrá que ser votada –sólo cabe el voto a favor o la abstención–. Pero la posibilidad de no alcanzar un acuerdo de integración y de que se llegue a una votación en la que el porcentaje se sitúe en el entorno del 50% está sobre la mesa. «Estaría deslegitimado –señala otro cargo afín a Morant– sí no tiene un apoyo de al menos el 50%».