Puig salta a la plaza (no como Sánchez)

La estrategia llevó a Sánchez a protagonizar imágenes de lo más variopintas. Jugar a la petanca con pensionistas en Coslada, entrar 'por sorpresa' en una biblioteca de un pueblo de Toledo para conversar con un grupo de mujeres... El Sánchez estadista dejaba paso al Sánchez normal y corriente, humano... quizá a la búsqueda de lograr unas simpatías similares a las de Yolanda Díaz.

Ximo Puig no tiene los problemas de valoración que sí que arrastra Sánchez. Probablemente el líder del PSOE no podría protagonizar un acto público como el que el president de la Generalitat y candidato a la reelección prepara para este miércoles. 'Ens vegem a la plaça' reza el eslogan de la convocatoria que ya corre por redes sociales.

Un acto «con música y animación», con la presencia de Puig y de la número seis de la lista del PSPV por la circunscripción de Valencia, Cristina Martínez. «Un president per a la majoria» y una imagen de Puig sonriente, casi risueño.

La idea que maneja la dirección socialista es la de un acto de conversación con los asistentes. No un mitin al uso, y sí en cambio una suerte de intercambio de ideas y reflexiones. De hecho, el partido ya se ha puesto manos a la obra para evitar que esa espontaneidad pueda derivar en comentarios o preguntas que pudiera firmar el mismísimo PP.

Los socialistas valencianos tratan de exprimir así el que está considerado como el mejor valor con el que Puig concurre a estos comicios, el de su cercanía. Una imagen de proximidad que le distancia a años luz de la de Pedro Sánchez. Eso unido a un nivel de conocimiento superior al 90%, un porcentaje al que no se acerca ninguno de sus adversarios.

De hecho, la idea del PSPV parece querer responder a esa estrategia del PP valenciano que vincula de forma reiterada a Puig con Sánchez, con la idea de hacer un ticket de dirigentes socialistas que es responsable de la sucesión de frentes abiertos con los que cuenta la Comunitat: la financiación, el agua, las inversiones, el corredor, la dependencia... Si el Gobierno central no actúa, Puig es aquí su representante, viene a ser la asociación de ideas.

El PSPV trata de romper esa imagen. Puig sí que es cercano, sí que sonríe y sí que dialoga con la gente. Estrategia a la defensiva, respuesta a la del PP valenciano, para poner en valor el conocimiento y la valoración del secretario general del PSPV.

Puig salta a la plaza. Pero de momento no es a la de toros. Con la convocatoria de elecciones autonómicas ya sobre la mesa, el PSPV sigue sin haber reservado fecha para disponer de la plaza de toros de Valencia para su acto central de campaña.

Tal y como ya informó este diario, el único partido que sí que ha comunicado su intención de utilizar el coso de la calle Xàtiva para su mitin central es el PP valenciano. Los populares han reservado la plaza para el próximo 21 de mayo, el domingo anterior a las elecciones municipales y autonómicas. Fecha y lugar estratégicos para reforzar la imagen de fortaleza y exhibir músculo que contribuya a decantar el voto de indecisos a favor de las candidaturas populares.

¿Y los socialistas? Aún quedaría margen para pedir la plaza de toros de Valencia. Pero lo cierto es que, a pesar de que Ferraz es consciente de que la dirección nacional del PP ha movido ficha. De hecho, los actos que ha venido organizando la dirección federal del PSOE en las últimas semanas han huido de los grandes aforos y se han concentrado en espacios medianos y pequeños.