Mata visitó diez veces en la cárcel al cabecilla del caso Azud siendo portavoz del PSPV

El problema de Mata es que ya cojeaba diez meses antes. El 30 de junio de 2021, como síndic del PSPV en Les Corts, aseguraba que si llegaba el día en el que tenía que elegir entre ser portavoz socialista o abogado del cabecilla del caso Azud, Jaime Febrer, optaría por ser abogado. Una cuestión de prioridad vocacional. El problema es que Mata, que esquivó el asunto tras publicar LAS PROVINCIAS el 26 de junio que había visitado al empresario corruptor en la prisión de Picassent, ya había elegido ser abogado por encima de su función de síndic del PSPV.

El lunes 7 de junio a las 11:55 horas es la primera vez que Manuel Mata -portavoz del PSPV en Les Corts- acude a la prisión Valencia II de Picassent para verse con el empresario Jaime Febrer, uno de los investigados principales en una trama de corrupción que afecta a dirigentes de varios partidos políticos. Un caso que se relaciona, principalmente, con la gestión en el Ayuntamiento de Valencia.

Azud se destapó a mediados de mayo y veinte días después, el entonces portavoz socialista, Manuel Mata, ya estaba metido de lleno en el proceso como uno de los abogados de Jaime Febrer, un empresario y promotor con fuertes vínculos con dirigentes y personas muy próximas a los socialistas valencianos. El entonces síndic aseguró en aquel momento que acudió al centro penitenciario para atender una petición del letrado Manuel Vergara, que representaba a Febrer en ese momento. En un principio, Mata trató de desvincularse directamente del empresario y ciñó la visita a una colaboración con su colega abogado. A partir de ese momento su rol fue distinto.

Desde esa primera aparición por la cárcel de Picassent, Mata volvió al centro penitenciario nueve veces más en un plazo aproximado de dos meses, según consta en el registro de entrada de la prisión. Una información que está incluida en la parte del sumario de caso Azud que ya no está secreta. Entre el lunes 7 de junio a las 11:55 horas y el martes 10 de agosto a las 13:23 horas, Mata se entrevistó diez veces en el penal con Jaime Febrer.

El síndic socialista, que gozaba del pluriempleo de portavoz y abogado gracias a que no cobraba la dedicación exclusiva como parlamentario, se permitió incluso la licencia de acudir de visita a la prisión con conductor y coche oficial. Mata utilizó los recursos de la Cámara valenciana para su disfrute personal y laboral. Al menos, así se le vio la tarde del 13 de julio de 2021, cuando a las 16:44 horas fue fichado por el parte de visitas en Picassent.

El vehículo oficial, para que la historia responda a toda la verdad, no gozaba de chófer oficial de Les Corts, ya que el propio Mata renunció al conductor para poder usar el vehículo para su uso personal. Al volante iba un trabajador del PSPV, porque hay que recordar que mientras era abogado de Febrer y portavoz del PSPV en el Parlamento autonómico, Mata también ostentaba un cargo orgánico de responsabilidad en las filas socialistas. El abogado de Febrer justificó el desplazamiento en vehículo oficial porque antes había tenido actividad en la Cámara regional.

El miércoles 28 de julio se produjo otra reunión en prisión entre Mata, que accedió al penal a las 11:12 horas, y el empresario corruptor. Un día después, Jaime Febrer ratificó la orden por la que designó «al letrado Manuel Mata Gómez para que le defienda en la causa y renuncia a las anteriores designaciones».

Mata anunció el 30 de abril que dejaría su cargo de portavoz del PSPV en Les Corts. La noticia saltó antes de la celebración del 25 d'Abril y días después de que se abriera el sumario de Azud. Presentó su renuncia por registro unos días después, por lo que fue la voz del principal grupo del Parlamento regional a la vez que abogado de un empresario encarcelado por corrupción durante diez meses. Un tiempo en el que supo capear el temporal ante la tibieza de los grupos de la oposición, que nunca incidieron demasiado en la doble condición del portavoz socialista, que dejó su escaño entre el olor de multitudes de sus compañeros.

Muy pocos cuestionaron en Les Corts la doble condición de Mata, que apostó por ser el abogado defensor de un empresario corruptor de cargos públicos, al que se le acusa de repartir importantes mordidas y sobornos a varios políticos a cambio de favores para proyectos urbanísticos. Varios de los cargos socialistas que podrían haberse beneficiado de esos sobornos han sido compañeros de Mata tanto en la bancada socialista de Les Corts como en cargos de responsabilidad en el partido. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, tampoco se atrevió a cuestionar en público la posición del portavoz de su grupo y siempre apuntó que era una cuestión personal de Mata.

Al final, tras cojear como síndico en la intimidad durante diez meses, Mata eligió ser el abogado de Febrer y abandonó el cargo de portavoz del PSPV. Durante mucho tiempo, el socialista subió a la tribuna del hemiciclo valenciano a defender la honorabilidad de su partido mientras al mismo tiempo se reunía en prisión con un empresario que aparece en un sumario como el principal corruptor de políticos y partidos. En ese sumario, incluso se apunta, según la investigación de la UCO de la Guardia Civil, que el PSPV se pudo financiar con fines electorales a través de operaciones y relaciones entre varias empresas que están siendo investigadas.