Podemos plantea el cierre de su sede en Valencia tras el batacazo del 28-M

En la carta que Podemos ha enviado a sus empleados, el partido asume que se enfrenta «a un escenario» tras las dos citas electorales que, además de la pérdida de peso político, supone una importante reducción de ingresos. En concreto revela que una «valoración inicial» de la situación sitúa unas pérdidas de un 70% a nivel estatal y un 90% aproximadamente en los territorios. De esta forma, la formación ha justificado el ERE con la necesidad de una «profunda reorganización del partido en todos los ámbitos» para adecuarse «al descenso de recuersos que supone». «Dicha reducción de ingesos lleva aparejada la necesidad ineludible de adaptar a los mismos los gastos de toda índole, incluidos los laborales, que en el caso de los territorios afectados implicará la extinción de los contratos y el cierre de los centros de trabajo», han explicado en la misiva.

Desde junio, tras la dimisión de Pilar Lima como coordinadora autonómica, la federación valenciana está dirigida por una gestora. Se trata de un «equipo técnico» a cargo de personas del núcleo de confianza de la exdiputada Lima como el que fue su secretario de Organización, Carles Fons, o nombres afines a Ione Belarra en la dirección estatal como María Teresa Pérez, portavoz del partido en Madrid, o Pau Vivas, miembro del Consejo Estatal.

A pesar de que en el anuncio del partido se detalla que el ERE afectará a siete trabajadores de la Comunitat Valenciana y que supondrá el cierre de federaciones, desde el equipo técnico de Podem en la Comunitat han negado que «suponga el cierre de federaciones autonómicas». «Es pronto para afirmar que se cerrará y la intención es mantener un espacio, veremos qué instalaciones se pueden mantener a la vuelta del verano», han afirmado fuentes de la gestora.

El partido se encuentra en mitad de un proceso de negociación con los representantes de los trabajadores y el área de recursos humanos. «La organización queda a disposición de las compañeras y compañeros con la convicción de que entre todas seremos capaces de encontrar las mejores soluciones para impulsar de nuevo a nuestra organización, a nivel autonómico y estatal, con la certeza de que seguir conquistando derechos es posible», ha reivindicado la formación morada. Desde la federación valenciana han explicado que «hasta que no finalice ese proceso no se sabrá cuántos trabajadores pueden continuar».

Asimismo han asegurado que se «está preparando una asamblea valenciana para renovar los órganos oficiales para una nueva dirección política que pueda establecer una hoja de ruta para la nueva etapa, que es lo que espera la militancia», que insisten «se ha crecido en el mes de julio». Desde la dirección han declarado que «aunque se reorganicen los recursos humanos, habrá gente trabajando para reforzar Podem» y que «va a seguir existiendo y haciendo política desde fuera de Les Corts» a pesar de lo que pase con la sede después del verano.