El jurado declara culpable a la mujer que mató de 50 martillazos a un amigo en Bétera
Soler, Morant y Bielsa. PSPV

El PSPV vuelve de Sevilla bicéfalo y con una batalla pendiente

Los socialistas valencianos asisten a la pujanza de Bernabé, que ahora debe conjugarse con el liderazgo de Morant mientras Bielsa se enfrenta a una dura reválida

Burguera

Domingo, 8 de diciembre 2024, 00:05

Los socialistas valencianos salieron del 41 Congreso Federal de Sevilla que el PSOE celebró en Sevilla más bicéfalos que nunca. Bicéfalas, porque son dos ... mujeres, Diana Morant y Pilar Bernabé, las que parecen destinadas a compartir la cúspide del escenario político, les guste más o menos. Que fuera en la capital andaluza donde se ha fraguado esta bicefalia en el PSPV no deja de ser lógico. Rafael Escuredo fue presidente de la Junta de Andalucía entre 1982 y 1984 con José Rodríguez de la Borbolla como secretario regional, puesto desde el que sucedió a Escuredo hasta 1990 mientras Carlos Sanjuán lideraba lo orgánico e impulsó a Manuel Chaves, que presidió la Junta para luego cedérsela a Griñán pero sin soltar las riendas de la secretaría general del PSA. Y antes se gestó el tándem entre Felipe González y Alfonso Guerra. Y luego llegó el de Susana Díaz con Juan Espadas, sin una pedalada en la misma dirección, pero ahí estaban los dos, subidos en la bicicleta. A grandes males, grandes remedios. En los partidos se hace de la necesidad virtud, y se huye de las bicefalias hasta que el liderazgo compartido es la única solución en un mar de dudas.

Publicidad

Del Congreso Federal salió Morant tan ministra como entró, aunque se fue menos vinculada a la dirección del PSOE y viendo cómo Bernabé apareció un rato por Sevilla el último día, domingo, para alabarla por su actuación en la DANA y por su nuevo papel como secretaria de Igualdad del PSOE, la número 4 del partido. Según el principio básico de la teoría gravitatoria de Newton y el final de toda historia política, la que no sube, como Pilar Bernabé, baja. O desaparece, que es lo que en ocasiones pasa con Morant desde que empezó a compaginar su ministerio con el liderazgo del PSPV. Esa actitud guadianesca de Morant se acrecentó durante la DANA y le llevó a ofrecer al PSPV para aprobar los presupuestos de Mazón de 2025 para luego pedir (a Feijóo) la salida de Mazón y ahora afirmar que su partido los apoyará si están «a la altura».

De la mano de Sánchez

Mientras la ministra está por concretar un discurso propio sin ecos de Ferraz y una estrategia que dure más allá de una semana, Bernabé saca jugo a su concreción. La delegada del Gobierno no se desprende de las botas de agua ni de un discurso muy institucional, haciendo gala de su habitual determinación sin dejar de enviar mensajeros para trabajarse las alianzas internas en el partido. Para colmo, ahora Bernabé recibe en público los parabienes de Pedro Sánchez, lo que en el PSOE abre todas las puertas, incluidas las del Congreso que le permiten equiparar su autoritas y potestas a la de Morant, que con toda seguridad saldrá del congreso autonómico del PSPV (primer fin de semana de febrero) más líder del partido que ahora, ratificada por los propios militantes valencianos por segunda vez y con el beneplácito de Ferraz que, al fin y al cabo, es quien la puso ahí.

Sin embargo, en esa responsabilidad como secretaría general y ministra deberá convivir con la de una delegada del Gobierno al alza, pujante y que parecía encaminada hacia la alcaldía de Valencia pero a lo mejor se le ha quedado corto el viaje.

Publicidad

Hasta 2027 queda una eternidad. El PSOE puede reconsiderar las opciones de alternativa a Mazón, con el que Bernabé tiene una relación personal cordial y leal a pesar de pasarse el día codo con codo, una situación en las antípodas de Morant, sin cordialidad y a codazo limpio con el jefe del Consell.

La madre de todas las batallas

Un buen momento para medir esa convivencia entre Morant y Bernabé será cuando se acerquen las fechas del congreso provincial de Valencia, la madre de todas las batallas en el PSPV. ¿Maniobrará la delegada del Gobierno para ganar posiciones en la provincia o hará como si la continuidad o la defenestración de Carlos Fernández Bielsa no fuera con ella? Obviamente, eso es lo que menos preocupa al actual secretario general de la provincia de Valencia, que volvió de Sevilla sabiendo que puede perder la silla a la que se descuide.

Publicidad

A la vez que se dirime el liderazgo en Valencia, el congreso provincial servirá de escenario para otras muchas cosas. Por ejemplo, la reconversión de los abalistas, una corriente que cultiva la fontanería orgánica con la pasión y profusión con la que los holandeses cultivan tulipanes. Por ejemplo, el destino de Vicent Mascarell, actualmente secretario de organización de la provincia y de todo el PSPV en la Comunitat. La multitarea de Mascarell parece condenada a desaparecer. Si dejase de ser el número dos del partido a nivel autonómico sólo sería un duro golpe para Mascarell, sino que dejaría en mal lugar una apuesta personal de Morant, que no está para perder ni a las canicas.

En cualquier caso, el nudo gordiano en el congreso provincial de Valencia, y que podría convertirse también en una pieza maestra del puzzle autonómico del PSPV de cara al futuro, es resolver la situación de Bielsa. El alcalde de Mislata rozó con la punta de los dedos la gloria de la presidencia de la Diputación de Valencia que le hubiera ahorrado tanta duda. La rozó pero no se la quedó, y eso también le privó de optar siquiera al liderazgo que ahora ostenta Diana Morant.

Publicidad

Bielsa se tuvo que conformar con el título de precandidato, sin pasar de ahí de cara al congreso que el pasado mes de marzo encumbró a Morant, una vitola que el alcalde de Mislata compartió con Alejandro Soler. El ilicitano, sin embargo, se ha alineado definitivamente con la Ejecutiva Federal y le ha dejado solo.

Mientras que los líderes provinciales, Bielsa, sobre todo, pero de algún modo también Soler, contemplan su paso por Sevilla con luces y sombras, ganancias y pérdidas, Tania Baños vuelve a Castellón sintiendo que la capital andaluza tiene un color especial. La alcaldesa de la Vall d'Uixó se convirtió en presidenta del Consell de Alcaldes tras el congreso de Benicásim, con la ascensión de Morant.

Publicidad

Dirigentes de todo, sucesores de nadie

Su nombre sonó como candidata al puesto que finalmente fue para Mascarell, al frente de la secretaría de Organización del PSPV. Baños sale de Sevilla como miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE. Hace menos de un mes que cumplió 34 años, una juventud que la sitúa en el espectro que los denominados 'pelayos', un grupo de socialistas valencianos del que forma parte Víctor Camino (líder nacional de Juventudes Socialistas), pero también José Muñoz, síndic del PSPV en Les Corts, orbitando junto a otras figuras como Sandra Gómez y a la espera de hacerse con las riendas del partido, no como sucesores de nadie (principalmente de Puig y de sus afines) sino como dirigentes de todo.

Muñoz debe someterse a una ratificación como síndic tras el congreso autonómico del PSPV, como es preceptivo después de cada cita congresual de ese ámbito. El equipo parlamentario de los socialistas valencianos vive pendiente de las instrucciones de Morant; o sea, de Ferraz. Tanto para negociar con el PP como para modular su oposición a Mazón. El grupo del PSPV precisa de un afinamiento porque durante el primer año de la legislatura no ha logrado coger el tono para cantarle las cuarenta a Mazón, y ese ajuste no llegará, como muy pronto, hasta después de la ratificación de Morant en el congreso autonómico.

Noticia Patrocinada

Soler, el 'hombre orgánico'

Si una nave extraterrestre tuviese la peregrina idea de abducir a Alejandro Soler Mur, dejaría tal hueco orgánico en el PSOE que haría falta una hormigonera llenita de socialistas para cubrir el amplio espacio de representación que actualmente ocupa Soler. El barón alicantino preside el PSPV, acaba de entrar en la Ejecutiva Federal del PSOE, lidera la provincial y hasta la de la ciudad de Elche. Es el gran 'hombre orgánico'. Soler rubricó en el Congreso de Sevilla su vuelta al redil sanchista. Quisó liderar el PSPV, pero Ferraz le paró los pies porque preferían a Morant. Después de cierta distancia, uno de los primeros sanchistas vuelve a la vera del líder supremo. Se incorpora a la Ejecutiva Federal del partido.

A partir de ahora, Soler decidirá o negociará después de hacer números de a qué cargo de los que ocupa le puede sacar más o menos rendimiento. Quizá a la presidencia del PSPV, estatus que le asemejaba a los jarrones chinos y que es más honorífico y ornamental que otra cosa.

Publicidad

Esa entrada a la Ejecutiva Federal provoca que se desvanezca el aura protestona que todavía envuelve a Bielsa, que siempre fue a la suya y ahora, cautivo pero aún no desarmado, solo le queda con seguridad lo suyo, Mislata. Soler, sin embargo, deberá amoldarse a su nuevo estatus y entender que, si ha entrado en la Ejecutiva, de algún lado deberá salir. Además de presidir el PSPV, es el líder de los socialistas ilicitanos y de la provincia. Siempre con el permiso de Soler, el actual portavoz del PSPV, Rubén Alfaro, alcalde de Elda, podría ganar espacio en ese pandemonium que es el socialismo en Alicante. En cualquier caso, el veterano exalcalde de Elche sacará la calculadora que siempre pulsa antes de abrir la boca y dar un pasito adelante. O atrás.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€

Publicidad