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A las puertas de la llegada de Alfred Costa como nuevo director de À Punt, la cadena pública ha licitado un concurso para contratar un servicio de asesoría que le permita remontar el vuelo en los índices de audiencia. La Corporación Valenciana de Medios de Comunicación está dispuesta a pagar 48.400 euros (IVA incluido) a la empresa que sea capaz de radiografiar los puntos débiles de una cadena que se sitúa casi en el anonimato. El objeto del contrato «es profundizar en el conocimiento de la oferta televisiva de À Punt y su relación con los principales canales de la competencia».
La intención es que los órganos directivos de la cadena pública dispongan de informes periódicos de audiencia para poder reaccionar de inmediato en la parrilla. Con los datos en la mano, se pueden tomar decisiones para modificar la programación, conocer los formatos más atractivos, orientar la parrilla en virtud del panorama televisivo del momento y tomar decisiones estratégicas en la posición de los programas y de los bloques publicitarios.
La contratación de esta consultora es uno de los últimos servicios que la dirección de Empar Marco –termina el 8 de marzo– y Enrique Soriano –sigue aunque su intención es salir– va a prestar a la empresa pública. El nuevo director, Alfred Costa, en su propuesta de trabajo apuntó que la televisión valenciana no había sabido llegar al espectador de más de 45 años, que a su juicio es el que realmente marca el éxito y el fracaso en los niveles de audiencia. Además, apuesta por ir a contenidos más vinculados al entretenimiento y volver a un modelo más cercano a la de la antigua Canal 9, aunque sin citarlo en su proyecto.
La consultora contratada deberá elevar informes diarios de audiencia con un estudio detallado de la audiencia del día, del anterior, del mismo día de la semana pasada, la media semana y la media anual. El informe debe contener también resultados por franjas, audiencias del resto de cadenas, cuotas por sexo, edad, provincia, hábitat, lengua e índice socioeconómico. El objetivo es contar con el perfil más exacto posible del potencial telespectador. Incluso se piden estudios de audiencia cada cinco minutos.
Otra de las funciones sería el minutado diario de los informativos y del magazine de la tarde. En el minutado se deberá identificar cada pieza, su hora de emisión, la duración, temática general, protagonistas que intervienen y las instituciones afectadas. Se busca también el minuto de oro y todos los indicadores de máximos y mínimos. El trabajo se tendrá que desarrollar a lo largo de un año. La presentación de las ofertas termina el próximo 25 de febrero, días antes de que Empar Marco ceda su puesto a Alfred Costa al frente de la cadena pública valenciana.
À Punt también había puesto en marcha un proceso para contratar un servicio que permitiera conocer los afectos de las diferentes comarcas de la Comunitat Valenciana en función de sus características lingüísticas hacia los medios públicos. Otro de los objetivos era analizar el posicionamiento de À Punt respecto a la competencia y comparar la parrilla de la televisión valenciana con otras cadenas de la competencia. Este concurso se licitó por 200.000 euros para dos años, aunque la Corporación de Medios de la Comunidad Valenciana anuló el pasado martes el pliego al evidenciar un error que no es subsanable en lo referente a los criterios de adjudicación. Ahora se presenta la incógnita de si À Punt volverá a llevar la propuesta a la plataforma de contratación.
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