Burguera
Jueves, 1 de agosto 2024, 00:57
La sentencia que condena al exvicealcalde de Valencia Alfonso Grau a cuatro años y medio de cárcel por irregularidades en la financiación de campañas ... electorales del PP de la capital tiene, lógicamente, como protagonista principal al propio Grau. Aparece nombrado en el texto de la sentencia en más de 300 ocasiones. El tercero más nombrado es el otro condenado, José Salinas, por ser considerado como el ejecutor de unas prácticas sobre las que el juzgado tenía una amplia documentación, especialmente en lo que se refiere al año 2007. ¿Y por qué tenía esa documentación? Pues por la actuación de la segunda persona más nombrada a lo largo de esa misma sentencia: Jesús Gordillo.
Publicidad
El que fuera asesor de Grau durante años y años es mencionado en la condena en más de 180 ocasiones, más que la que fuera secretaria del grupo municipal, García Fuster, o el concejal Santón, estos dos últimos finalmente considerados inocentes de las prácticas que condenan al que fuera hombre fuerte de la exalcaldesa Rita Barberá.
El papel jugado por Gordillo es clave, según señala la propia sentencia. El tribunal distingue sobre lo que sí puede probarse en 2007 respecto a lo que no se puede constatar en la campaña de 2011, ya que en este último caso no hay una ratificación total del origen irregular de los fondos utilizados por el PP para sufragar los gastos electorales de su campaña. A diferencia del año 2007, sobre la ejecutoria de cuatro años después no se contó con testimonios de trabajadores que ofrecieran información que permitiera afirmar que los pagos a una empresa que organizaba la campaña del PP, y que que luego recibía dinero público, no se correspondían con trabajo alguno. En 2007 sí se contaba con un testimonio incriminatorio, el de Gordillo, a la sombra de Grau durante años, un fiel colaborador hasta que dejó de serlo.
A pesar de que en el juicio se intentó desdecir, la sentencia condenatoria establece que Gordillo, en la vista oral, «al ser preguntado por la documentación que entregó al periodista señor Alfonso (director de Valencia Plaza), dio una versión que consideramos inverosímil». El tribunal indica que en diciembre de 2016, ante la Guardia Civil y en las dependencias del Juzgado de Instrucción, había aportado una documentación y realizado una declaración que en la sentencia se da por cierta y real.
Publicidad
Gordíllo empezó a perder la conexión con Grau cuando el entonces vicealcalde decidió dimitir, el 16 de marzo de 2015. El asesor acompañaba al mandatario municipal por los pasillos del Consistorio con gesto cariacontecido mientras su jefe durante años mantenía una actitud relajada antes de anunciar su salida del Ayuntamiento. Un año y medio más tarde, frente a las autoridades, Gordillo le señaló, finiquitando una relación de complicidad muy prolongada. En la legislatura que arrancó en 1995, Gordillo entró como asesor de Grau, y estuvo en contacto con él 20 años de manera más o menos directa, siempre un paso por detrás de su jefe, siempre silencioso y hermético, dispuesto a lo que hiciera falta si Grau se lo pedía. Y se lo pidió. Y lo hizo.
Según la sentencia, Gordillo participó en una transacción económica para sufragar los actos electorales del PP en la campaña electoral de 2007 utilizando dinero desviado de un modo que ahora se considera ilícito, y que el tribunal establece que le entregó el propio Grau. Sin embargo, con la salida de su jefe del grupo municipal, en 2015, Gordillo perdió pie en el PP, que sufrió una debacle electoral en las elecciones de mayo de aquel año, y una reestructuración interna donde no hubo sitio para Gordillo. Al año siguiente, Gordilló cantó. Por si faltaba algo en esta historia, en 2018, ya con Joan Ribó (Compromís) al frente del Ayuntamiento de Valencia, el exasesor logró entrar en la bolsa de trabajo municipal de Economistas, una carrera que finalizó mientras era asesor del ahora condenado, y durante muchos años su jefe.
Publicidad
A pesar de haberse convertido en el típico 'testigo de cargo' en la causa contra Grau, entre los miembros de la actual oposición (PSPV y Compromís) no cuenta con grandes simpatías ni con una excesiva consideración por su acto de supuesto 'arrepentimiento'. Básicamente, porque finalmente, en el juicio, intentó rectificar. Sin embargo, la sentencia recuerda de manera reiterada, en más de un centenar de ocasiones, su papel determinante a la hora de condenar al poderoso hombre del que fue una sombra aparentemente fiel, y que la oposición emplea ahora, tras la condena, para apretar las tuercas a la actual alcaldesa del PP, María José Catalá.
Los grupos municipales de Compromís y PSPV en el Ayuntamiento exigieron ayer la retirada de honores a la exalcaldesa Barberá después de la sentencia de la Audiencia. Desde Compromís reclaman la convocatoria de un pleno extraordinario en septiembre en el que presentarán tres mociones para que se retire el título de alcaldesa honoraria a Barberá.
Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Los ríos Adaja y Cega, en nivel rojo a su paso por Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.