Una fecha muy señalada para la vida social

Nadie se quiere perder en la vida social    la cita con los premios 'Valencianos para el siglo XXI', una velada convertida a lo largo de sus veinticuatro ediciones en una referencia para el conjunto de la Comunitat. El altísimo poder de convocatoria que volvió a acreditar este año LAS PROVINCIAS con la invitación a que acudieran a la entrega de sus galardones el quién es quién de la sociedad valenciana se reflejó en el desbordante aspecto que presentaba la sala del Museo de Ciencias Príncipe Felipe, completamente abarrotada. Y quien a última hora no pudo acudir mandaba un mensaje de aviso, igual que alertaban de que llegaría un poco más tarde de lo previsto quienes se habían despistado o se veían atrapados en uno de los atascos que proliferaron esa noche del jueves bajo la lluvia que arreciaba en Valencia.

El diluvio no arredró sin embargo a las más de mil personas que finalmente se dieron cita para asistir a una ceremonia que congregaba a los rostros más conocidos de ámbitos como la política o la economía, así como del deporte o la cultura. Era igualmente muy visible la presencia de destacados referentes de la vida municipal: la alcaldesa y numerosos concejales del Ayuntamiento de Valencia, acompañados por miembros de sus respectivos equipos dieron brillo a una velada que contó también con numerosos fans de uno de los premiados, el deportista Ilia Topuria, junto con un nutrido grupo de invitados que acudieron a celebrar su reconocimiento con los distinguidos en la edición de este año de nuestros galardones.

También quisieron festejar con el equipo de LAS PROVINCIAS un destacado grupo de compañeros de otros medios de comunicación, cuya presencia agradeció en su discurso el director, Jesús Trelis. Parlamentarios de Les Corts, miembros de la Diputación, dirigentes de los diferentes partidos políticos... Rectores de nuestros campus, diseñadores, mandatarios del sector de la empresa y de la economía.... No, nadie se quiso perder una noche señalada en rojo en el calendario de la vida social valenciana, culminado con un cóctel muy propicio para la confidencia, la tertulia y el brindis: un brindis por la buena salud de unos premios a punto de cumplir sus bodas de plata.