La Diputación mantendrá la carretera comarcal de Favara pese a los atropellos

«Hasta que no haya otro atropello mortal parece que no se va a mover nada. Es muy triste». Estas son las palabras de resignación de la alcaldesa de Favara, Oro Azorín, sobre la encallada situación de la carretera CV-510. Esta vía comarcal atraviesa la localidad de la Ribera Baixa y desde hace décadas se ha estado negociando con la Diputación de Valencia, propietaria de esta vía, para conseguir que se construya una variante que saque del casco urbano esta carretera con alto volumen de tráfico.

En los últimos años se había conseguido un acercamiento de posturas para intentar poner fin a este punto negro para los peatones pero finalmente no ha habido acuerdo y los vecinos de Favara seguirán soportando las retenciones dentro de sus calles y vivirán con el peligro de cruzar esta vía a diario.

La Diputación de Valencia había propuesto trasladar la CV-510 a una de las calles exteriores del municipio para que los vehículos no tuvieran que cruzar por el centro de la población. Esta alternativa no se descartaba por el Consistorio si se trataba de una medida provisional hasta que se construyera una circunvalación que sacara definitivamente el tráfico del casco urbano.

Sin embargo, tras varias reuniones, la Diputación ha señalado que éste es el único proyecto viable económicamente para esta problemática por lo que no se contempla a medio plazo construir la reclamada variante. Ante esta situación, el Ayuntamiento de Favara votó en contra de la alternativa ya que reclaman una solución definitiva.

«Se ha peleado mucho por conseguir que se acabe con el problema de la carretera pero no queremos que la solución sea llevarla a otro punto», explica la alcaldesa.

El pasado año los vecinos de Favara comenzaron a movilizarse para conseguir que la Diputación actuara de forma urgente. Y es que tras muchos sustos a causa de la velocidad con la que algunos conductores atraviesan esta carretera, en abril de 2022 una vecina moría atropellada mientras cruzaba uno de los pasos de peatones. Ni siquiera la gravedad de este accidente ha sido suficiente para conseguir una solución a la CV-510.

Es a partir de la primavera y sobre todo en verano cuando esta carretera genera más problemas en Favara ya que es la conexión de los municipios de la Ribera Alta y Baixa con las playas de Cullera. En esta temporada alta se multiplica el tráfico y también el peligro para los peatones.

Favara además de estar atravesada por la comarcal CV-510 también está dividida por la N-332. Desde que se puso en funcionamiento la A-38 y se liberó la AP-7 el volumen de tráfico por la nacional se ha reducido de forma considerable.

El siguiente paso es la conversión de esta carretera en una zona más amable e integrada en el resto de la población. Para ello, el Ministerio de Transportes ha licitado las obras de adecuación de la travesía a su paso por el casco urbano de Favara que contarán con un presupuesto de 770.000 euros y que ya se han licitado. Se espera que el proyecto que dotará a esta zona de áreas ajardinadas y espacio para los restaurantes estará acabado en 2025.

El ministerio tiene previstas cinco actuaciones de humanización de travesía en toda la provincia de Valencia. Además de la de Favara, también está en licitación la de Sueca para convertir la N-332 en un boulevard. En Xeraco y Requena también se adecuarán tramos de esta Nacional para integrarlos en los cascos urbanos mientras que el quinto de los proyectos afecta a la N-330 entre Utiel y Sinarcas.

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