Montserrat refuerza la vigilancia en sus urbanizaciones para frenar la oleada de robos

La gran cantidad de núcleos urbanos diseminados que se ubican en el término municipal de Montserrat dificulta la tarea de vigilancia en comparación a otros municipios de su tamaño, unos 8.000 habitantes. Las urbanizaciones son muchas veces objeto de robos por su lejanía con el pueblo y su baja intensidad de residentes en horas centrales del día. Bien lo saben en varias áreas de Montserrat que desde que comenzó 2023 han sufrido continuos robos que han provocado una gran alerta.

Hace unas semanas, los vecinos de Colinas de Venta cabrera, Monte Cabrera y Amistad denunciaron públicamente la situación insostenible que estaban viviendo con robos y allanamientos casi a diario. Esta alerta hizo que el Ayuntamiento de Montserrat aumentara la vigilancia por parte de la Policía Local en estas zonas y parece que los robos han cesado en estas urbanizaciones.

Sin embargo, los vecinos no quieren que esto sea una solución puntual para acallar las críticas por lo que reclaman medidas que se sostengan en el tiempo y que garanticen su seguridad. Por este motivo, un grupo de residentes de las urbanizaciones acudió al pleno ordinario celebrado esta semana para plantear sus reclamaciones ante la Corporación.

«Necesitamos que el Ayuntamientos nos apoye porque somos más de 250 familias las que están viviendo en esta zona y nos sentimos aislados e inseguros», expusieron los vecinos en el pleno.

Tanto el alcalde, Josep Maria Mas, como los concejales mostraron su predisposición a intervenir en esta problemática pero señalaron que la competencia es de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y que sus medios en esta materia son muy limitados. Aún así desde hace unas semanas se ha reforzado la vigilancia en la zona con el paso de las patrullas y señalaron que se buscarían medidas para seguir aumentando la seguridad.

«Conocemos las limitaciones del Ayuntamiento pero creemos que se pueden utilizar otras estrategias, más allá de aumentar el personal, para conseguir disuadir a los ladrones. Lo único que queremos es vivir tranquilos como el resto de vecinos de Montserrat porque somos igual que ellos», han apuntado los residentes de estas colonias.

Los vecinos han reforzado la seguridad en sus propias viviendas con rejas, control exhaustivo de los vehículos que entran en las urbanizaciones o cámaras ante el miedo a los atracos, que se estaban produciendo incluso con los propietarios en su interior, pero siguen exigiendo que tanto la Guardia Civil como la policía ataje estas situaciones que generan un gran desasosiego en los afectados.

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