Trece alumnos de Canals denuncian que una agencia de viajes les ha dejado tirados sin intercambio educativo en Alemania

Decepcionados y frustrados. Así se quedaron los trece alumnos y dos profesores del Colegio Parroquial Sant Antoni Abad de Canals después de que la agencia con la que organizaron el viaje de intercambio educativo a Alemania les dejara tirados en el aeropuerto, según denuncian los afectados.

Los hechos ocurrieron el 17 de abril. Habían quedado con la gerente de la agencia que el mismo día del vuelo recogerían los billetes. La madre encargada se personó a primera hora en el establecimiento, con la sorpresa de que no estaba abierto. Tampoco recibió respuesta a las numerosas llamadas telefónicas que realizó para pedirle explicaciones.

Tanto el centro como los padres afectados denunciaron los hechos ante la Guardia Civil e iniciarán acciones legales contra la empresa no sólo por el coste económico, sino por el daño moral a estos alumnos de 14 y 15 años.

«Se les ha privado de una experiencia educativa y formativa con la que estaban muy ilusionados. Si a cualquier persona les afecta un engaño como estos, a estos niños, que se han quedado sin esta experiencia vital, aún más», explica uno de los padres, Xavier Durà, que además, como abogado, está preparando toda la documentación para adjuntar con la demanda.

El viaje se enmarcaba dentro de la relación mantenida con un centro alemán, un colegio religioso de Detmold, del estado federal de Renania del norte, cuyos alumnos habían estado meses antes conviviendo con las familias de Canals. Ahora tocaba devolver la visita y que los alumnos españoles conocieran las costumbres del país germánico.

«Las familias alemanas se han quedado con las casas preparadas para acogernos y el centro con las actividades planeadas. La noticia también ha disgustado allí mucho», explica Asun Gil, la directora del centro.

Y es que la vivencia que se realizó entre el 28 de noviembre y el 5 de diciembre pasado en Canals, fue muy positivo y ambas partes quedaron muy contentas con estos días en los que los canalinos se volcaron con sus visitantes y los visitantes pudieron disfrutar y conocer un poco de la cultura y costumbres valencianas.

«Nosotros somos un colegio pequeño, de una línea, pero el colegio de acogida alemán es muy grande, con un funcionamiento diferente y con poca capacidad para reorganizar de nuevo el viaje», subraya la directora, por lo que los alumnos posiblemente se queden sin poder aprovechar esta experiencia, «estamos a la espera a ver qué nos dicen, pero lo vemos complicado».

Tanto padres como centro explican que eligieron esta agencia local de la que no habían oído ningún tipo de problema. «Es una de las que hay en el municipio y como empresa local, optamos por ella para que el negocio beneficie al comercio de la localidad. Ninguno supusimos que esto podía ocurrir», señala Xavier Durà.

De hecho, asegura que están conociendo que al parecer hay más personas afectadas por la agencia. Vecinos que tenían previsto algún viaje y a las que también habría dejado tirados. El problema es que nadie de la empresa responde.

No descartan que, si hay más afectados, puedan constituirse en una plataforma para defenderse conjuntamente.

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