Carcaixent reclama un malecón para proteger Cogullada

Una de las zonas pobladas que más sufre las consecuencias del incremento de caudal del Barxeta es la pedanía de Cogullada que ha tenido que ser desalojada en varias ocasiones porque el agua entraba en las viviendas.

Por ello, desde Carcaixent reclaman a la CHJ que actúe en este punto del barranco cuanto antes para proteger a los ciudadanos de esta zona.

«En varias reuniones hemos manifestado la necesidad de que se cree un malecón para que desvíe el agua hacia la zona de campos y evitar que entre en el núcleo urbano«, explica el alcalde de Carcaixent, Paco Salom, que en la visita del presidente de la CHJ y la delegada del Gobierno a Alzira ya manifestó la necesidad de compatibilizar los grandes proyectos con otros como éste de más rápida ejecución.

El barranco de Barxeta pasa por debajo de la carretera a través de un espacio insuficiente para el volumen de agua que transporta en cada episodio de lluvias. Un situación muy frecuente porque este cauce recoge el agua de diferentes puntos de la zona alta. «Toda la red de barrancos acaba desembocando en el Barxeta y el agua entra muy rápido en el pueblo», recuerda Salom ya que cada temporal deja en vilo a estos vecinos.

Pero éste no es el único punto conflictivo de este cauce ya que en la zona donde confluye con el río Júcar, ya en Alzira, también genera riadas. «Existe un proyecto desde hace más de 20 años para desviarlo unos 100 metros y que desagüe más cerca del Pont de Ferro», comenta el alcalde de Carcaixent que no entiende porque la CHJ sigue esperando a nuevos estudios antes de iniciar algún proyecto de los pendientes. Pese a este contratiempo, Salom apunta que desde hace unos años la relación con la CHJ «está siendo más directa pero no dejaremos de ser reivindicativos».

Reivindicativos como los miembros de la Federació d'Associacions de Veïns d'Alzira que han conseguido que las necesidades de los barrancos Barxeta y Casella entren en la agenda de la CHJ.

Sin embargo, ante la falta de un proyecto concreto y un inicio de obras, ahora piden una reunión con el secretario de Estado y la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ya que son los máximos responsables en esta materia.

«Queremos que la ampliación del barranco de la Casella sea una realidad antes de agotar la presente legislatura (2023). El Ayuntamiento se ha comprometido a hacer lo mismo. Con ello la sociedad civil y la institución municipal van conjuntamente en defensa de los intereses de la ciudadanía de Alzira», señala Voro Pérez, de la Federació de Associacions de Veïns.