Investigan como homicidio la muerte de un hombre en su casa de Albalat de la Ribera

La Comandancia de la Guardia Civil de Valencia investiga como un homicidio la muerte de un hombre de 72 años en su domicilio, del cual era propietario, en Albalat de la Ribera. El fallecido era un electricista jubilado Rafael G. al que todos conocían como 'Boti'.

El cuerpo sin vida ha sido descubierto este viernes sobre las diez de la mañana después de que los vecinos del edificio alertaran al alcalde de Albalat, Felip Hernandis, de que se desprendía un fuerte olor de una de las viviendas del bloque. Hernandis ha puesto en marcha el protocolo en estos casos y ha avisado a la Guardia Civil y a los bomberos.

Hasta el piso de la calle Pont se han desplazado agentes de la Guardia Civil y bomberos para acceder al interior de la vivienda. Después de que los bomberos hayan tumbado la puerta, los agentes han entrado y segundos después han informado de que no podía acceder nadie más porque había un cadáver.

Poco después llegaban agentes de la Unidad de Criminalística para analizar el interior de la vivienda. El levantamiento del cadáver se ha producido a las 15.21 horas, momento en el que han sacado los restos del hombre. El fallecido, del que se desconocen las causas, era el propietario del primer piso donde residía en una de las vías de entrada a la población pero también poseía varios inmuebles más en la localidad.

Agentes de la Unidad de Criminalística han trabajado durante todo el día recabando pruebas para determinar la causa exacta de la muerte, aunque todo apuntaría a que se trata de un homicidio.

Al parecer los vecinos del bloque no habían visto a Rafael desde el lunes 17 de octubre. Algunos residentes han indicado que hace días que venían percibiendo un olor extraño en la escalera y habían avisado a las autoridades, aunque desconocen que si habían acudido al bloque a echar un vistazo antes de este viernes. Ante el aumento del hedor hoy han vuelto a llamar a Emergencias. Y es que desde el mismo portal se podía percibir horas después de la retirada del cadáver el mal olor del que han alertado los vecinos y que ha servido para descubrir a la víctima.

El Ayuntamiento de Albalat había mandado también una brigada de limpieza por si tenían que actuar ya que el hombre tenía un perro y pensaban que podía haberle pasado algo al animal al estar solo en la casa. Cuando se ha informado de que el propietario estaba fallecido ha causado una gran sorpresa que ha roto la tranquilidad de este pequeño municipio de la Ribera Baixa.

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