a. talavera
Martes, 26 de octubre 2021, 10:49
La línea C-2 de Cercanías que une Moixent con Valencia es una de las que mayor número de usuarios y densidad de tráfico ferroviario asume. Desde el 6 de septiembre se está llevando a cabo unas obras de renovación de infraestructuras y del sistema de electrificación en el tramo comprendido entre La Pobla Llarga y Silla. La actuación es la más importante del Plan de Infraestructuras Ferroviarias de la Comunitat Valenciana ya que cuenta con un presupuesto de unos 100 millones de euros y se prevé finalizarla en verano.
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El objetivo de estas obras es mejorar la fiabilidad de las instalaciones, aumentar su durabilidad y reducir las incidencias pero también servirán para reducir el tiempo de los trayectos. De ello también depende que finalicen las actuaciones en la nueva plataforma de alta velocidad que conecta Valencia y Alicante. " Se estudiará con los operarios qué posibilidad tenemos de ganarle tiempo de viaje. Con la nueva plataforma todos los trenes Euromed y Ave pasarán por ella y así se podrá conseguir esta reducción y una mayor fiabilidad al haber menos trenes", explica el subdirector de Operaciones Este de Adif, Fernando Ugena.
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En estos momentos se está procediendo a la sustitución de la vía en la zona de Benifaió. Un punto conflictivo por su inundabilidad que se pretende resolver también con este proyecto. "Hemos creado una comisión entre Adif, la oficina de coordinación, CHJ, el Ayuntamiento de Benifaió y la dirección general del Agua en la que se está trabajando para mejorar técnicamente este punto para evitar inundaciones. Estamos intentando introducirla en el proyecto actual de renovación", afirma el coordinador del Plan de Cercanías de la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio.
Esta actuación necesita una gran planificación porque los operarios sólo tienen unas pocas horas durante la noche para ir avanzando en su cometido. Y es que la sustitución tanto de vías como de las catenarias se realiza fuera del horario de paso de los trenes para no interrumpir el funcionamiento normal de este servicio.
Esto supone que cada noche tienen que sacar las 20 máquinas que trabajan para eliminar las vías antiguas y las traviesas, realizar su sustitución por las nuevas y recolocar el balastro que quede igualado al milímetro para que no haya ninguna incidencia cuando a primera hora los trenes vuelvan a circular.
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"Comenzamos con la electrificación para avanzar ya que siempre se tiene que devolver la vía en perfecto estado y se han realizado unos tres kilómetros y ahora ya estamos sustituyendo las vías", añade el director de la obra, Enrique Albelda.
Cada jornada se renuevan unos 540 metros de vía y por el momento ya se ha avanzado unos dos kilómetros desde Silla a Benifaió. Primero se acabará con la sustitución de raíles en dirección sur, hasta la Pobla Llarga, y luego se comenzará desde este punto hasta la localidad de l'Horta.
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La infraestructura que se está cambiando es de los años 70, es decir, lleva más de 40 años de uso lo que supone que estaba agotando su vida útil. Con los nuevos materiales se consigue una mayor fiabilidad y estabilidad para los trenes.
Desde Adif han anunciado que en los próximos meses se licitarán otros proyectos que afectan tanto a la línea C-1 y C-2. Uno de ellos es la renovación del tramo entre Xàtiva y l'Alcúdia de Crespins que supone una continuación de los trabajos actuales. Por otra parte, también se licitará la sustitución de carriles y catenaria entre Silla y Cullera.
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