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El tesoro de las Clarisas reluce en Gandia

El espacio cultural, que contiene cuadros de San Leocadio y Joan de Joanes, será un referente en arte religioso en la Comunitat Valenciana

ÓSCAR DE LA DUEÑA

Sábado, 28 de marzo 2015, 00:16

El Museo de Santa Clara abrió ayer sus puertas en Gandia. Los tesoros artísticos que las monjas Clarisas han ido acumulando durante siglos salieron a la luz para siempre. Lienzos, joyas y esculturas se exponen de forma definitiva en el recinto que lleva el nombre de la santa y que se ha ubicado en la Sala de Homens del medieval Hospital de Sant Marc, uno de los espacios más antiguos de Gandia.

La apertura del museo se ha retrasado más de cinco años, pero la demora ha valido la pena, ya que el espacio muestra una selección de un centenar de obras de las casi 400 con las que cuentan las religiosas. En la inauguración estuvieron presentes el alcalde de Gandia, Arturo Torró; el arzobispo de Valencia; Antonio Cañizares, y la vicerectora de la Universitat Politècnica de València, María Victoria Vivancos, ya que el museo está gestionado entre los tres organismos. El responsable del museo es el profesor Joan Aliaga.

La inauguración fue un acto que pasará a la historia de Gandia, ya que la ciudad ofrece desde hoy la posibilidad de contemplar de cerca obras de Paolo de San Leocadio, Joan de Joanes o Paolo de Matheis, virtuosos del pincel de diferentes épocas. Todas las piezas entraron en el convento de Gandia gracias a las donaciones de la familia Borja.

Torró destacó en la apertura que se siente especialmente orgulloso de dos de los recintos que ha puesto en marcha en la legislatura: El Museo de Santa Clara y la Cova del Parpalló. «Este gobierno apuesta por la cultura como el que más y lo hemos demostrado». Cañizares, por su parte, dijo que es un honor como arzobispo estar en Gandia abriendo al público el tesoro que las monjas «han custodiado durante siglos».

El nuevo museo cuenta con seis espacios diferenciados que narran la historia del convento, de la congregación de las Clarisas y de Sant Francesc de Borja. Todas las obras se exponen en la Sala de Homens, pero también se han utilizado dos pequeños espacios contiguos para mostrar más obra: la sala de la Torre y la de la Muralla.

La primera de las zonas del museo es la que habla de los primeros siglos de vida del convento de las Clarisas de Gandia. En ella se muestran pinturas de los siglos XV y XVI, además de los pergaminos de fundación y refundación del convento de Gandia, de 1428 y 1457. En este espacio hay además lienzos de la Escuela Valenciana y de talleres como el de Pere Nicolau.

El segundo espacio es el destinado al legado de María Enríquez. En él hay obras de Paolo da San Leocadio, que fueron financiadas por la Duquesa.

Entre ellas La Adoración a los Reyes, a los Pastores y La Ascensión. Estas piezas formaban parte de un retablo que ha desaparecido, pero en la sala se ofrece toda documentación para que el visitante conozca la calidad de las obras y la relevancia de la abuela de Sant Francesc de Borja.

La tercera zona está dedicada a Joan de Joanes y a su escuela, donde destaca Fray Nicolás Borrás. Este espacio cuenta con varias obras, ya que pertenecen al Alto Renacimiento.

Entre otras, se exponen un retablo empotrable de Joan de Joanes, dos sargas, pintura sobre tela no preparada, dos escenas de La Pasión y una Verónica, estas últimas elaboradas por Borrás.

El cuarto de los espacios es el más amplio y también está en la Sala de Homens. En él se muestra un conjunto escultórico compuesto por tallas de madera del siglo XVI, de la Escuela de Roma. Se trata de un Nacimiento compuesto por figuras policromadas con remates en oro.

Santas de la congregación

El grupo está coronado por seis ángeles colgados. En este espacio también hay lienzos de santas Clarisas, como Clara de Asís, Santa Inés o Santa Gertrudis. Junto a todas estas obras destacan también El Descendimiento, de Paolo de Matheis o un talla de la Inmaculada en madera, de principios del siglo XVIII.

Otro de los espacios, el quinto, es el ubicado en la Sala de la Torre, que está dedicado a Sant Francesc de Borja. Hay un retrato del Patrón de Gandia y otro de su esposa, Leonor de Castro. También se muestra orfebrería, un cáliz y la custodia. Además en este recinto está el cíngulo de San Francisco de Asís, el cordón franciscano que según la tradición la madre del santo, Juana de Aragón, llevó al dar a luz. La sexta zona es la que se ha destinado a las esculturas. En ella se muestran dos Cristos Yacentes y un buen número de tallas.

Entre las piezas que se exponen en el Museo de Santa Clara destaca un lienzo de La Natividad. Esta pieza pertenece al Cabildo de la Catedral de Valencia, que la ha prestado temporalmente. Se trata de una tabla de gran formato (178 centímetros de ancho por 158 de altura) pintada por Felipe Paolo, hijo del artista italiano Paolo de San Leocadio, en el año 1520.

Felipe Paolo colaboró con su padre en los trabajos que realizó en Gandia a principios del siglo XVI para la duquesa María Enríquez, entre ellos el retablo mayor de la Colegiata de Santa María. Felipe se formó en el taller de su progenitor.

La Natividad es una pintura al óleo sobre madera cuya técnica se asemeja mucho a la de Paolo de San Leocadio. Las obras de padre e hijo tienen entre diez y quince años de diferencia. Durante hoy y mañana habrá jornadas de puertas abiertas para que toda la ciudad pueda conocer el recinto. Después, el precio de entrada será de tres euros, pero habrá descuentos para colectivos.

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