Siete kilómetros en la ruta más 'fresca' del Desert de les Palmes

En esta ocasión detallaremos el recorrido de la número siete que está considerada la más 'fresca' de la zona: las Fuentes del Desert. Algo más de 7 kilómetros en una ruta circular de dificultad moderada con un desnivel de 251 metros.

Dejaremos el vehículo en el mirador de Sant Josep. Nuestro primer destino será la ermita y la Font con el mismo nombre. Posteriormente nos dirigiremos hacia la izquierda. Pocos metros más adelante nos encontramos la ermita de Montserrat. En esta zona, denominada área de los Frailes Carmelitas, existen numerosas de estas construcciones. Un pino con dos ramificaciones anuncia la señal en la que nos indica que tomemos de nuevo el camino de la izquierda.

Ahora llega el momento de disfrutar de la nutrida vegetación: primero, almendros (aunque están abandonados) y, posteriormente una zona que se ha ido recuperando con distintas especies de las que se hacen eco en la página de Parcs Naturals de la Generalitat: «Encinas (Quercus ilex), estepa borrera (Cistus salvifolius), coscoja (Quercus coccifera), lavanda (Lavandula stoechas), madreselva (Lonicera implexa)».

En un llano repleto de enebros se encuentra una señal que nos indica el camino hacia la Font Tallada a nuestra derecha. Pero nosotros debemos continuar recto para llegar al Pla de Muletes. Desde aquí volveremos a virar hacia nuestra izquierda antes de girar hacia la derecha en la bifurcación que nos encontraremos metros más adelante.

Ahora nos enfrentamos a un ligero descenso en el que nos encontramos con el Palomar Barrera. Tal y como expresan los organismos oficiales, esta construcción: «Pretende ayudar a evitar los daños que las rapaces puedan ocasionar a la colombicultura de los pueblos cercanos al Paraje Natural».

Seguimos descendiendo hasta vislumbrar una señal que nos llevará hasta la Font de Roc. Este aseguran que es el manantial más «puro» y en mejor estado de todo el espacio natural. Una senda pequeña precederá al camino asfaltado del barranco de Miravet. Debemos tomar el camino de la derecha: Font Tallada espera a unos 600 metros de distancia. Chopos y olmos forman parte de la decoración natural de un punto en el que se pueden ver las Agulles de Santa Àgueda, una zona de la que ya hemos hablado y sobre la que podéis leer aquí que, entre otras peculiaridades, se encuentra en sus faldas que contienen los únicos alcornoques de este espacio.

Aquí nos encontraremos con una vertical que señaliza el regreso a la Font de Sant Josep. Caminaremos por una senda que dará paso a una pista asfaltada que deberemos cruzar para seguir nuestro camino. En la ladera continuaremos disfrutando de una variada vegetación: jaras, brezos, coscojas… serán los que nos indiquen el camino hasta una bifurcación en la que se nos indicará que, a nuestra derecha, podremos llegar hasta la Font de Sant Josep.