Las consecuencias de dormir toda la noche con el aire acondicionado

Conciliar el sueño durante el verano es mucho más difícil debido al calor. De hecho, muchas veces no nos queda más remedio que encender el aire acondicionado o el ventilador. A pesar de que pueden mejorar el descanso y nos ayudan a dormir más fresquitos, los expertos advierten de que dormir toda la noche con el aire acondicionado puede tener efectos negativos en la salud.

Diferentes estudios indican que los aires acondicionados tienden a reducir la humedad del aire, lo que puede causar sequedad en las vías respiratorias. Esto no solo agrava problemas respiratorios preexistentes, como alergias, asma y bronquitis, sino que también puede contribuir a la irritación de la piel y a un resecamiento excesivo.

Además, dormir durante toda la noche con el aparato encendido puede derivar en un enfriamiento excesivo del cuerpo. Si la temperatura en el cuarto es muy baja durante varias horas, el cuerpo podría tener dificultades para regular su temperatura interna, lo que puede provocar calambres musculares y rigidez.

Además, el sonido que emite el aparato puede afectar también a la calidad del sueño, provocando interrupciones en el descanso y llevando a una sensación de cansancio durante el día. Por ello, los expertos recomiendan seguir los siguientes consejos:

- Abrir ventanas y puertas para permitir que circule el aire fresco durante la noche.

- Utilizar ventiladores para refrescar el ambiente

- Utilizar sábanas ligeras y transpirables para evitar el sobrecalentamiento

- En el caso de dormir con el aire acondicionado, se recomienda apagarlo durante ciertas horas de la noche para permitir que el cuerpo se aclimate a la temperatura ambiente.

Si aún así no consigues conciliar el sueño existe un truco japonés que nos ayudará si lo que queremos es pasar una noche bien fresquita sin el uso de ventiladores. Y lo más llamativo es que no tiene ningún misterio. Se trata de poner el colchón en el suelo, literal.

Ya lo veíamos en películas japonesas, y lo cierto es que más allá de una costumbre, los japoneses duermen en el suelo porque, según la física, el calor siempre tiende a subir hacia arriba y las zonas más bajas de la casa siempre son las más frescas.

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