Cuatro infalibles trucos para enfriar rápidamente el coche sin aire acondicionado

Llega el verano y con ello el calor. Durante esta época, subir al coche se convierte en una incomodidad importante hasta que el vehículo logra alcanzar una temperatura adecuada. El aire acondicionado cobra importancia, pero hasta que logra soltar el frío, pasa un tiempo que resulta muy molesto.

Para tratar de evitar que esto ocurra, existen diversos consejos. Como por ejemplo, el método japonés, que consiste en bajar la ventanilla del copiloto y abrir y cerrar la puerta del conductor hasta en cinco ocasiones con energía. Esto logrará que se expulse el aire caliente del coche en pocos segundos. Además de este, también hay otros trucos:

Cogiendo las bolsas que se utilizan para congelar alimentos, es posible reducir la temperatura del vehículo. Para ello, hay que colocarlas en el suelo y es imprescindible que sean impermeables. De igual modo, se pueden usar las placas de hielo de las neveras portátiles, aunque son más recomendables para trayectos cortos.

Colocando trapos o toallas húmedas en los aireadores del coche es posible reducir el calor ya que la humedad acumulada en el textil permite enfriar el habitáculo más rápido. Es aconsejable hacerlo con el conductor acompañado, ya que el copiloto puede humedecer la tela una vez se seque.

Se recorta la parte superior de una botella de plástico y se coloca en la ventanilla, con la boca apuntando hacia dentro. El aire se comprime para pasar por el cuello de la botella y se descomprime al salir, saliendo frío.

Este método requiere un gasto económico, pero es una buena solución. Esto supone una barrera para los rayos de sol, ya que se evita que pasen en su mayoría.

• Temas
• DGT Dirección General de Tráfico