¿Por qué tu gato te rechaza?

A veces, convivir con un gato puede ser más complicado que hacerlo con personas. Son bonitos y entrañables, pero tienen un carácter muy peculiar y multitud de manías que los convierten en unas de las mascotas más difíciles de comprender. Sin embargo, resulta imposible resistirse a su encanto y solemos acudir a darles muestras de cariño que más de una vez rechazan.

Tener gatos en casa requiere paciencia y comprensión, pero las dosis de amor y compañía que se recibe de ella vale la pena. Los felinos tienen muchas particularidades y tenemos que adaptarnos a ellas para que la convivencia funcione bien. Son enigmáticos y a veces incluso asociales, algo que hace que podamos llegar a cometer errores sin saberlo.

Por ejemplo, dormir con ellos es un hábito que creemos adecuado pero no es del todo conveniente. En ocasiones nos apetece acurrucarnos con nuestro gato, pero no deberíamos acostumbrarnos a esta práctica, ya que nuestro ciclo de sueño puede verse alterado. Además, aunque no seamos alérgicos a los gatos en un principio, llevarnóslos a la cama puede descencadenar en una serie de enfermedades respiratorias.

De lo que no cabe duda es que los gatos son animales de lo más especiales. Tienen un comportamiento único y, a veces, misterioso. Una prueba de ello es el momento del baño, que se convierte en toda una lucha entre el dueño y el animal. Los felinos detestan mojarse, porque se sienten incómodos, nerviosos e indefensos.

Y otra de las veces en las que percibimos que se sienten incómodos es cuando nos rechazan. Seguro que te ha pasado: te acercas a un felino y opta por dar media vuelta e ir hacia otro lado, o directamente te deja que le acaricies y luego se queja y se va. Sí, es un rechazo en toda regla y viniendo de ellos es algo más que habitual.

Esta actitud distante forma parte de su encanto y para ellos está totalmente justificada, porque los gatos tienen la necesedad innata de tener control sobre su entorno, es su manera de sentirse protegidos. Son muy independientes y el hecho de que decidan 'basta' cuando les estés acariciando y opten por irse es porque necesitan su espacio y reafirmar la seguridad que les da poder marcharse.

SI has pasado un tiempo fuera de casa, dale tiempo. Es normal que el gato pueda sentirse deshabituado y necesitará volver a conectar contigo a su propio tiempo.

Eso sí, si notas un cambio brusco de actitud en tu mascota, presta atención a que no se deba a ninguna dolencia o malestar y llévala al veterinario si sospechas que puede tener alguna patología.