La diseñadora valenciana que viste a la Infanta Sofía y triunfa entre adolescentes

Diez años después, dirige una empresa que factura cinco millones de euros vistiendo a chicas -como ella las llama- de todo el mundo, tanto on line como a través de sus diez puntos de venta en toda España, en Valencia, Madrid, Barcelona, Granada, Sevilla… «Y este año abriremos en Pamplona, Badajoz, Murcia, León y Cádiz». A la diseñadora le da un poco de vértigo hablar de estas cifras y cree que parte del éxito se debe al contacto directo con sus clientas. «Nos gusta saber de ellas, que nos escriban por las redes sociales, whatsapp o la web. Hablamos y pensamos como ellas».

Uno de sus últimos hitos fue que la Infanta Sofía eligiese uno de sus vestidos para el concierto previo a los Premios Princesa de Asturias. La hija pequeña de los reyes llevó un vestido corto satinado de color verde botella de la firma. «Estamos muy agradecidos de que se reconozca nuestro trabajo que además se hace todo en España». Rocío Botella recuerda que fue una repercusión «tremenda; al principio no me lo creía, es un momento que me hubiese gustado compartir con mis abuelos, que seguro hubiesen sentido el mismo orgullo y felicidad que sentimos todos en ese momento».

Desde hace unos años toda su vida gira entorno a este proyecto; sus allegados dicen que es como su bebé, ya que le da atención 24/7. Tras todos estos años trabajando por construir no sólo una marca sino una empresa escalable, sigue luchando por hacer crecer en España una marca de ropa 100% hecha desde su taller en Valencia. Este año traerá al mundo a su segundo bebé ya que espera ser mamá de una niña en junio.

Rocío Botella cree que sus diseños triunfan entre la generación Z porque desde el principio «hemos sido una más. Nos gusta saber de ellas, que nos escriban por cualquiera de nuestros canales (Instagram, whatsapp, el chat de nuestra web, por teléfono,... ) Hablamos y pensamos como ellas, y porque por encima de todo, a la hora de diseñar, ellas son nuestro punto de partida».