La multa de la DGT que podría recibir el 60 % de los conductores

La Guardia Civil de Tráfico vigila las carreteras pero no puede llegar a detectar cualquier infracción que se comete. Los controles con drones han permitido captar acciones completamente ilegales por parte de conductores que han puesto en riesgo su vida y la del resto de personas con las que se cruzan. Las cámaras fijas en carreteras y los radares abrieron la posibilidad de controlar la velocidad o la utilización del cinturón de seguridad sin tener que disponer de una patrulla policial en la misma carretera. Pese a ello, el propio cuerpo asume que el 60 % de los conductores podrían ser multados por una acción tipificada como «infracción grave».

Seguramente sea la multa que menos se pone en carretera, ya que se da con suficiente asiduidad en todas las carreteras de España. Atendiendo al reglamento que rige las normas de tráfico en todo el territorio nacional, no utilizar los intermitentes cuando es obligatorio está considerado «falta grave», por lo que el conductor debe ser multado con una sanción de 200 euros, sin que exista pérdida de puntos del carné de conducir.

La situación ha llegado a tal punto que la Guardia Civil ha tenido que utilizar sus redes sociales para recordar el uso obligatorio de este aviso lumínico en varias ocasiones, indicando que «el 60 % de los conductores« los utilizan mal en una rotonda y que »más de la mitad« sigue haciendo mal uso de los mismos cuando se retira de una glorieta.

La ley es clara. Hay que utilizar los intermitentes para «girar, cambiar de carril, aparcar o desaparcar, adelantar o incorporarse y para salir de una glorieta», por lo que en caso de que sea advertido por un agente de tráfico el conductor recibirá dicha sanción de 200 euros.

Se pone poco, pero si se aplicara todas las ocasiones en las que se registra, sería, sin duda, la multa de la DGT que más veces se impone.

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