Una mujer ha ocupado un lujoso chalé en la exclusiva urbanización de Coves Noves, al norte de Menorca, alegando que se lo merece. «Esto es un chalé para mí, que me lo merezco», ha afirmado la okupa mientras recorre las diferentes habitaciones de la casa, mostrando con orgullo su nueva residencia a través de vídeos publicados en redes sociales.
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En sus publicaciones, la mujer no escatima en detalles sobre la vivienda. «El cuarto de matrimonio, mirad qué armarios, mirad qué balcón tengo en mi dormitorio, mi piscina allí abajo, mi playita, aquello es el mar, y ahora en mi cuarto tengo otro baño, que mirad qué cuarto de baño...», continúa. La vivienda cuenta con tres cuartos de baño, cuatro dormitorios, suelos de parqué y ventanales con impresionantes vistas al mar, lo que ha llevado a la okupa a bromear diciendo que ni la famosa cantante Beyoncé podría tener una casa así.
La propiedad, que pertenece a una promoción de cuatro chalés con piscina comunitaria y jardín privado construidos en 2021, está a la venta por 670.000 euros. La inmobiliaria encargada de su comercialización ya ha denunciado la ocupación ante la Guardia Civil.
José Pons, uno de los trabajadores de la inmobiliaria, ha explicado en una entrevista en el programa 'Tiempo al tiempo' de Cuatro, que la Guardia Civil intentó desalojar a los ocupantes, pero estos se ampararon en la legislación vigente. «Aludieron que llevaban más de 48 horas... Tienen muy claras cuáles son las leyes actuales de este país y lo que les ampara».
El empleado también ha querido destacar la facilidad con la que los okupas pueden evadir el sistema y obtener cobertura legal. «Es tan fácil poder saltarse el sistema y dar cobertura legal a esta gente, que vive al margen de lo que todo ciudadano honesto y trabajador debe hacer», asegura.
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Pons ha denunciado que estos okupas forman parte de «una mafia organizada» que se dedica a ganar dinero mediante engaños y estafas. «Al parecer, esta gente venía ya de otro complejo okupado en una zona próxima que lleva mucho tiempo siendo un foco de okupación, de delitos, de drogas, de robos...», afirma. Con un toque de ironía, Pons añade que debían estar algo incómodos en un apartamento más pequeño, «y querían vivir al estilo Beyoncé».
La situación ha generado una gran controversia y ha puesto de manifiesto las dificultades legales para desalojar a los okupas en España. Mientras tanto, la okupa sigue disfrutando de su nueva y lujosa residencia, compartiendo su vida cotidiana y mostrando los lujos de su chalé a sus seguidores en las redes sociales.
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