El alimento que ayuda a frenar el envejecimiento y ralentiza la caída del cabello

Los superalimentos y las infusiones se han convertido en ese «ingrediente extra» que nos ayuda a conseguir los objetivos marcados después de los períodos de excesos. Una solución a la que se recurre para llevar a cabo una dieta milagrosa que nos permita perder peso de forma rápida y eficaz. Pero los 'superfoods' son algo más que eso.

Este tipo de alimentos son muy beneficiosos para el organismo gracias a sus múltiples propiedades y un alto valor nutricional, por lo que si se consumen acompañados de una dieta rica y variada, se evitan las calorías vacías tales como la bollería o el alcohol y se realiza ejercicio físico de manera frecuente, se obtendrán resultados en un tiempo menor al previsto. No obstante, hay que recalcar que los expertos indican que las dietas milagro no existen y hay que seguir los consejos nutricionales de la gente que domina el sector.

Retomando el tema de los superalimentos, los hay variadas y de múltiples formas. Algunos ayudan a depurar el organismo, otros a combatir el envejecimiento y los hay que reducen el colesterol. La ventaja de todos ellos es que se pueden conseguir de manera rápida y sencilla en supermercados, herboristerias o tiendas especializadas. Uno de tantos es el polen, un superalimento conocido aunque sin demasiado renombre que no es otra cosa que el gameto masculino de las flores que fecunda sus ovarios.

El polen de abeja contiene una gran cantidad de nutrientes. Destaca por tener vitaminas del tipo A, D, E, B1, B2 y B6. Así como ácido nicotínico, ácido pantonénico, C, K, colina y rutina. También destaca por un alto contenido en enzimas. Con todo ello, es una gran fuente de antioxidantes, que ayudan a prevenir o retrasar el daño a las células causado por los radicales libres.

Este alimento destacada por prevenir la caída del cabello por su contenido en cistina, un ácido aminado que aumenta el sistema piloso. Además, el polen destaca por sus funciones dermatológicas que mejoran la apariencia de la piel y disminuyen las arrugas.

Es particularmente rico en vitaminas del grupo B y vitamina C, destacando además la presencia de minerales como el magnesio, el potasio, el calcio, el hierro y el silicio, así como de bioflavonoides (quercitina y rutina) y enzimas digestivas (amilasa y fosfatasa). Todo ello lo convierten en un cóctel de propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, que ayudan a combatir el estreñimiento y regular el tránsito intestinal. Además reduce el dolor y las molestias que causan estos problemas al mismo tiempo que rebajan la hinchazón.

El polen se puede encontrar en formato fresco o seco. Por norma general se presenta en forma de granulado en tarros o sacos, aunque también podemos adquirirlo como comprimidos o cápsulas.

Las dosis recomendadas son de unas 2 o 3 cucharadas diarias del granulado, macerado en miel o mezclado con zumo de frutas, yogur, kéfir o mueslis, pero también es posible tomarlas solas. En etapas de mayor desgaste físico o intelectual pueden aumentarse las dosis, pasando a 3 o 4 cucharadas diarias.

Si se trata de cápsulas, 1 o 2 al día, serían más que suficientes y si es coincidiendo con las comidas mucho mejor. Lo recomendable son tratamientos de aproximadamente 15 días, con descansos de 10, en periodos de 3 meses.

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.

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