El alimento probiótico que contribuye a reducir el colesterol y mejora la salud digestiva

La época navideña ya está muy cerca y se trata de unas fechas en la que es habitual cometer excesos en la alimentación dada la gran cantidad de reuniones y comidas que hay con familiares y amigos. Por ello, todos aquellos que están preocupados por tener un estilo de vida saludable deberán estar atentos.

Para intentar mantener la forma, es recomendable que realicen ejercicio de manera habitual y también que incorporen ciertos alimentos que permitan mantener la línea. Uno de ellos puede ser el tempeh, consumido especialmente por vegetarianos. Es un producto fermentado originario de Indonesia.

Consiste en una soja blanca cocida y fermentada mediante un hongo llamado Ryzopus Oligosporus y un control de la temperatura detenido. Tiene un sabor ligeramente salado, que recuerda al de un champiñón o nuez. Según apunta en 'Vidae' Elena Maestre, Miembro del Col·legi de Dietistes-Nutricionistes de Catalunya, «se puede hacer tempeh con cualquier legumbre con un nivel alto en proteínas como las alubias, los garbanzos, la soja negra o las azukis».

Cuenta con una serie de ventajas para el organismo que detallamos a continuación:

Las isoflavonas de la soja que se encuentran en el tempeh ayudan a reducir los niveles del colesterol. De igual modo, es rico en niacina, una vitamina que eleva el colesterol bueno y desciende los triglicéridos y el colesterol 'malo' (LDL).

El tempeh es una fuente de fibra, ya que cada 100 gramos contiene 10 gramos de este nutriente. Es un alimento probiótico que instala bacterias beneficiosas en nuestros intestinos que combaten aquellas perjudicales.

Contiene gran cantidad de proteína y además no va acompañado de grasas. Cada 100 gramos aporta aproximadamente unos 19 gramos de proteína. De igual modo, también aporta mucho calcio y hierro.

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