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M. Palacios
Lunes, 2 de diciembre 2024, 01:45
El pan, la pasta y la patata son tres de los alimentos más consumidos en España, sin embargo es lo primero a lo que uno debe renunciar si decide ponerse a dieta. Y esto se debe a la gran cantidad de calorías que contienen.
Los hidratos de carbono, también llamados carbohidratos, se han convertido en los grandes enemigos ya que su consumo excesivo puede ser perjudicial al aportarle al cuerpo más energía de la que necesita, un exceso que acaba almacenándose en forma de grasa.
El nutricionista Pablo Ojeda ha hablado al respecto y ha querido compartir un truco para que el consumo de estos nutrientes engorde mucho menos y, de paso, mejorar nuestra salud intestinal. Ha sido en el programa de radio de Las mañanas Kiss donde ha querido compartir que «los hidratos de carbono, por cada gramo, contienen aproximadamente cuatro calorías. Sin embargo, existe una manera de reducir esa cantidad hasta unas 2,5 calorías por gramo».
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Tal y como ha explicado el experto, «la clave para conseguirlo está en cocinar los hidratos, enfriarlos y convertir su almidón en almidón resistente». Pero, ¿qué significa realmente esto? «Cuando el hidrato está recién hecho y calentito, su composición facilita una rápida absorción por parte del organismo. Esto significa que es una energía rápida», ha comentado el nutricionista. Sin embargo, al enfriar el alimento, «las moléculas de almidón se recolocan de tal manera que se convierten en almidón resistente».
Dicho así podríamos pensar que el truco sería comer siempre los hidratos de carbono fríos. Sin embargo, Ojeda aclara que no es necesario: «Si se calienta nuevamente el alimento, este no pierde esa estructura molecular que adquirió al enfriarse. Sigue siendo almidón resistente».
Por último, el nutricionista ha añadido que, además de reducir la capacidad calórica a solo dos calorías y media por gramo, con este tipo de almidón resistente se mejora la micorbiota intestinal, facilitando una mejor digestión y evitando la sensanción de inflamación o hinchazón. Y esto es debido a que también es un potente prebiótico.
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