Las 5 prendas imprescindibles (para ellas) que nunca pasan de moda

Si hay una prenda estrella, y que no puede faltar en ningún armario, esa es la camisa blanca. Y más durante la primavera. Una de sus principales características es la versatilidad y para elegirla sólo basta con seleccionar la que más se adapte a tu forma de ser; o más ceñida para conseguir que se adapte a tu figura, o de estilo masculino.

Ya sea durante el día o para la noche, es un básico para un look ejecutivo o más casual. En caso de duda, es uno de esos complementos clásicos a los que recurrir y con los que siempre se acierta.

Imprescindible. No hay look al que no le combine un blazer, ya sea en color bleige o blanco, o con algún estampado. Pero sin duda, es el blazer negro con el que siempre se acierta, en cualquier momento del día.

El blazer negro siempre tiene fuerza sean como sean las tendencias imperantes ese año y aguanta una temporada tras otra.

Si lo que buscas es algo más cómodo o informal que un blazer, opta por un cárdigan de lana. Es una de las opciones más recomendables para el día a día, ya sea combinado con unos pantalones vaqueros o con un vestido largo estilo 'boho chic'. Además, es muy recomendable para esos días de primavera en los que bajan un pelín las temperaturas.

Unos buenos pantalones vaqueros son una apuesta segura para cualquier look, ya sea por el día o para cualquier evento por la noche. Son fáciles de combinar y aunque con los años han ido sufriendo modificaciones en cuanto al diseño, nunca pasan de moda.

De tiro alto, medio, bajo; con rotos; lisos o 'color block'; de pata de elefante o corte pitillo... Un pantalón vaquero para cada una. O para adaptarse a cómo se quieran lucir en un día determinado.

La camiseta de rayas tiene una historia detrás que merece ser recordada. Corría el año 1858, en medio del Segundo Imperio francés, un decreto publicado en el Boletín Oficial de la Armada estableció cómo debía ser el uniforme de sus marineros: pantalón de pata ancha, camisa blanca con cuellos azules, abrigo corto de lana y jersey de rayas que permitiera reconocer a los trabajadores del mar si tenían la mala suerte de caer por la borda.

Fue Coco Chanel la primera persona del mundo de la moda quien sacó de los barcos esta prenda con su reconocido talento para saltarse las reglas. No paró hasta conseguir incorporar la 'marinère' a su colección náutica de 1917. Su triunfo revolucionó la historia de la moda.