Secciones
Servicios
Destacamos
LAS PROVINCIAS
Sábado, 16 de abril 2016, 11:18
El pasado 11 de abril un hombre de Salt, un municipio de Girona, acudió a un control de alcoholemia para recoger a su hija y a unas amigas porque habían dado positivo y los Mossos dEsquadra habían inmovilizado su vehículo.
Hasta aquí todo normal, lo curioso fue cuando los Mossos procedieron a hacerle el control al hombre para asegurarse que estaba en condiciones de llevarse el coche.
noticias relacionadas
Fue entonces cuando el padre de la chica dio una tasa de 0,71 miligramos, triplicando casi el límite permitido.
El hombre, imputado por un delito contra la seguridad vial, ha sido citado para presentarse a declarar ante un juzgado de Girona.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El pueblo de Castilla y León que se congela a 7,1 grados bajo cero
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.