Botellones de alto riesgo, peleas y oleada de robos en la Marina Real

Medio centenar de jóvenes protagonizaron un violento incidente en la madrugada del domingo en el puerto de Valencia al lanzar botellas y vasos a cuatro policías y dos vigilantes que acudieron a la Marina Real para auxiliar a la víctima de una agresión. Los agentes tuvieron que recular y se refugiaron durante algunos minutos detrás de los vehículos policiales mientras esperaban la llegada de refuerzos para dispersar a la violenta multitud.

El grave incidente es uno más tras las oleada de peleas y robos que se han registrado durante las últimas semanas en esta zona de ocio y sus alrededores. El alboroto se saldó sin heridos gracias a la rápida intervención de una decena de patrullas de la Policía Nacional de Valencia.

Una veintena de agentes acudieron con urgencia a la Marina Real minutos después de que sus compañeros pidieran apoyo. Los policías dispersaron al grupo de violentos en pocos segundos, pero no detuvieron a nadie al no poder identificar a los jóvenes que lanzaron las piedras y botellas. Algunos agentes utilizaron escudos para protegerse de las agresiones.

Los hechos se iniciaron sobre las dos y media de la madrugada del domingo cuando los vigilantes de la Marina Real avisaron a la policía porque una decena de individuos habían golpeado a un joven. Dos policías nacionales y dos policías portuarios se trasladaron al lugar y se entrevistaron con el chico, que tenía cortes en una ceja y la nariz, para tratar de identificar a los agresores.

Mientras el herido explicaba a los agentes que había sido atacado por un grupo de árabes y latinos, un joven de raza negra se acercó, profirió insultos a los policías e instigó a otros individuos a arrojarles piedras. El alborotador huyó cuando llegaron los primeros refuerzos policiales, pero fue identificado luego tras ser retenido por los vigilantes.

Los botellones y el consumo de drogas en los alrededores de los locales de ocio han disparado en los últimas semanas las peleas dentro y fuera del recinto portuario. También han aumentado las concentraciones de jóvenes sin mascarillas y sin guardar la distancia recomendada por la autoridades sanitarias para evitar los contagios de Covid-19, así como los robos y hurtos de móviles.

Esta oleada de delitos e incidentes ha desbordado a la policía en varias ocasiones. La Unidad Canina de la Policía Local de Valencia ha intervenido gran cantidad de dosis de droga en esta zona de ocio. Muchos jóvenes arrojan al suelo papelinas de cocaína o pequeñas bolsas con marihuana para evitar ser multados cuando ven a los perros adiestrados.