Un vecino octogenario de Calicanto ingresó el domingo en el Hospital de Manises con un cuadro de neumonía y tras las preceptivas analíticas dio positivo en la bacteria de la legionella. Una vez conocido el caso las alarmas se dispararon en la zona, donde hace dos veranos ya hubo un brote de legionelosis con siete casos. Uno de ellos falleció antes de que se declarara la epidemia y otro, vecino de Torrent aunque con segunda residencia en la urbanización de Chiva, murió aunque el área de Sanidad lo desvinculó del brote.
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Ayer, tras conocerse este caso, la noticia corrió como la pólvora y muchos vecinos acudieron al punto de información municipal para saber cómo actuar. El Ayuntamiento se puso en contacto con Sanidad para confirmar el tema y tanto la conselleria como el equipo de gobierno confirmaron que era un caso aislado aunque van a estar vigilantes. El afectado se encuentra hospitalizado y estable.
Hace dos años, la conselleria tardó unos días en confirmar el brote. La causa, tras cerrarse la investigación, fue una mala cloración del agua y la rotura de una bomba, unido al mal estado de la red de tuberías. El Ayuntamiento se ha puesto en contacto con la empresa y esta le ha facilitado los datos de los análisis del agua, que son normales. El Consistorio ha remitido las analíticas a las asociaciones de vecinos para tranquilizarlas. Ahora, hay que estar a la expectativa por si surgieran nuevos casos antes de descartar definitivamente un nuevo brote.
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