Un clan ocupa ilegalmente un piso para guardar su droga en la zona de Casitas Rosas de Valencia

Ocupar la casa del vecino para guardar droga. Es la conducta delictiva que la Policía Nacional ha descubierto en un nuevo golpe contra el narcotráfico en la conflictiva zona de las Casitas Rosas, en Valencia. Han sido detenidos una mujer y un hombre de 23 y 29 años, de origen español. Les acusan de suministrar sustancias estupefacientes a los consumidores desde dos domicilios de un edificio de la barriada.

Especialistas de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) decidieron abrir una investigación tras detectar un preocupante aumento de venta de drogas en este punto 'caliente' del distrito Marítimo. Hubo varias jornadas de vigilancia y los policías lo vieron claro: había un continuo trapicheo a cargo de dos personas desde dos viviendas.

Las primeras sospechas e indicios culminaron en una entrada y registro que se llevó a cabo de forma coordinada en ambas casas. Participaron efectivos de la Unidad de Intervención Policial (UIP), guías caninos con perros especializados en la detección de drogas y medios aéreos.

Una minuciosa inspección dio sus frutos: los agentes se incautaron de 55 gramos de heroína, casi 54 de cocaína y útiles para la preparación de las dosis. También tenían básculas de precisión y dinero en efectivo. La pareja ha sido arrestada por un presunto delito contra la salud pública y usurpación de bien inmueble.

«En la casa que ocupaban ilegalmente almacenaban los estupefacientes, lo que les permitía disponer de ellos con comodidad, puesto que residían en el inmueble colindante», detallan desde la Jefatura Superior de Policía de Valencia. Los dos sospechosos, que acumulan antecedentes, fueron puestos a disposición judicial.

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