Las 10 claves del crimen de la mujer de Castro Urdiales

La muerte, supuestamente a manos de sus hijos, de una mujer en Cantabria ha consternado a toda España. A la espera de que la investigación aclare la totalidad de los hechos, esto es lo que se sabe hasta ahora:

Una mujer de 48 años fue hallada muerta en la tarde noche del miércoles 7 de febrero, amordazada en el interior de un coche en la calle Monte Cerredo de la localidad cántabra de Castro Urdiales. Sus dos hijos estaban en paradero desconocido.

La Guardia Civil arresta a los hijos de la mujer fallecida, de 15 y 13 años. Al de mayor edad se le investiga como presunto autor de los hechos, mientras que el más pequeño sería inimputable al tener menos de catorce años.

La investigación de la Guardia Civil apunta a que los dos hermanos mataron a su madre asestándole varias puñaladas y luego trataron de simular un secuestro como coartada, para lo que llamaron a su abuela.

La víctima fue hallada en el suelo del asiento trasero de su coche amordazada y con varias bolsas de basura cubriendo parcialmente el cuerpo. Presentaba varias heridas por arma blanca y la investigación, de forma preliminar, apunta a que la muerte fue causada al ser apuñalada en el cuello.

Los investigadores tienen constancia de una riña familiar antes de la muerte de la mujer, aunque tienen aún que determinar su posible relación directa con el crimen. No existen denuncias previas ni había indicios de que existieran problemas de violencia en esta familia.

La mujer trabajaba como celadora en el Hospital de Cruces, en Barakaldo (Vizcaya). La víctima era natural de Vizcaya, si bien residía en la localidad cántabra desde hace años.

El Juzgado de Menores decreta para el hijo mayor internamiento en un centro de reforma de menores en régimen cerrado, por un periodo inicial de seis meses, y que se podría porrogar por tres más, pues el plazo máximo legal es de nueve. El hijo menor se encuentra en un piso de protección.

Los dos menores son hijos adoptados por la pareja y proceden de la Europa del Este (Rusia). Silvia López, la víctima, era también catequista en Castro Urdiales donde vivía con sus hijos y su marido. El hombre se encontraba de viaje de trabajo cuando sucedieron los hechos.

El hijo de 15 años confiesa a la fiscal que asesinó a su madre: «Cogí un cuchillo y le corté el cuello». El hijo menor declara que previamente Silvia López le empezó a pegar y le agarró del cuello. «Mi hermano se tiró por detrás para que me soltara y ella cayó al suelo. Nos pegaba habitualmente».

Respecto al hijo mayor y para este tipo de delitos, la Ley Orgánica de Responsabilidad Penal del Menor prevé medidas de internamiento en régimen cerrado de entre uno y cinco años y, posteriormente, una de libertad vigilada de hasta tres años, según ha explicado la fiscal encargada de la cautelar. Sobre el hijo de 13 años, la Unidad de Valoración de la Subdirección de Infancia evaluará si ha de retornar con su padre o puede ser acogido por otro familiar.

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