Prisión para los dos detenidos por el asesinato de la maestra de Rafelcofer

Prisión provisional, comunicada y sin fianza para los dos detenidos por el crimen de la vecina de Rafelcofer. Ambos quedan investigados en una causa abierta inicialmente, sin perjuicio de ulterior calificación, por delitos de asesinato y robo con violencia e intimidación en casa habitada.

Así lo ha decretado la magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Gandia después de que ambos hayan pasado a disposición judicial este miércoles como presuntos autores del crimen de Rosa del Carmen Pous Escrivà.

El primero en entrar a declarar ante la titular del juzgado número 3 ha sido Antonio que sobre las 10:30 horas bajaba del furgón de la Guardia Civil y a cara descubierta accedía a las dependencias judiciales. Este vecino de la Font d'En Carròs aseguraba a los periodistas que esperaban en la puerta que «no sé nada» cuando se le ha preguntado por el crimen de la maestra jubilada. Sin embargo, según las investigaciones del Grupo de Homicidios de la Guardia Civil, este expresidiario fue el encargado de asestar las puñaladas a la víctima.

Antonio ha respondido a las preguntas de todas las partes y ha negado su participación en los hechos de los que se le acusa.

A las 12 del medio día recorría el mismo camino hacia las dependencias judiciales su amigo Rubén, el otro detenido por la muerte de Rosa del Carmen. Éste, a preguntas de los periodistas, ha asegurado, en valenciano, que «soy inocente», mientras se cubría la cara con una camiseta. Y es que desde el primer momento que fue interrogado por los agentes inculpó a su amigo Antonio con el que estuvo consumiendo sustancias estupefacientes la noche del asesinato.

Pasadas las dos de la tarde, ambos hombres salían del juzgado camino de la prisión de Picassent tras declarar durante varias horas cada uno y por separado. Tan sólo se han cruzado en el interior de las dependencias para firmar sus respectivos autos.

El abogado del Antonio ha avanzado que recurrirá el auto de prisión provisional para intentar que su cliente pueda salir de la cárcel antes de la celebración del juicio.

Según ha podido saber LAS PROVINCIAS, mientras Rubén estaba prestando declaración ante la jueza, Antonio se mostraba muy afectado e, incluso, lloraba en la sala de espera. Y es que ambos amigos niegan los graves hechos de los que se les acusa y por los que ya han ingresado en prisión provisional.

Cabe recordar que Antonio, un expresidiario que reside en la Font d'en Carròs, y Rubén, vecino de la víctima en Rafelcofer, están acusados de la muerte de la maestra cuyo cuerpo fue encontrado con más de 15 cuchilladas en su domicilio.

Rubén era vecino de Rosa en la calle Xiquet y junto a Antonio estuvieron hasta altas horas de la madrugada en la casa contigua a la de la asesinada. El cuerpo de la mujer de 66 fue descubierto el domingo a las dos de la tarde por una de su hija que fue alertada por un vecino al encontrar su cartera sin dinero tirada en un barranco cercano al municipio.

Los investigadores del Grupo de Homicidios centraron sus sospechas desde el principio en los dos individuos que ahora ya están en prisión. Estos hombres, de 44 y 46 años de edad, fueron puestos en libertad tras ser interrogados en un primer momento pero varios guardias civiles de paisano los vigilaron día y noche para detenerlos en el momento que pudieran probar su participación en los hechos.

Así sucedía el pasado martes cuando lograron reunir suficientes pruebas incriminatorias contra ellos y tras realizar los registros oportunos en la casa de la víctima y posteriormente en las residencias de los dos amigos.

Según las investigaciones, Antonio S. asestó las cuchilladas a la mujer de 66 años. La minuciosa inspección que realizó la Guardia Civil en el domicilio de la víctima fue clave para inculpar al exconvicto. Los especialistas del Servicio de Criminalística hallaron una huella del presunto asesino y varias gotas de sangre en la calle entre las casas de la víctima y Rubén O.

Los investigadores también encontraron unas zapatillas y varias prendas con restos de sangre durante los registros de las viviendas de los dos detenidos. Además, una cámara del Ayuntamiento de Rafelcofer grabó a los dos sospechosos la noche del crimen cerca del barranco donde unos vecinos encontraron el monedero de la víctima.

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