La fachada del edificio de Campanar estaba aislada con lana de roca y una resina pudo ejercer de acelerante

Aunque las investigaciones se encuentran todavía en una fase inicial, los expertos apuntan a que la causa de que el fuego se propagara tan rápido podría estar en un material termoplástico utilizado, como podría ser una resina aplicada en las placas de aluminio para adherirlas a la fachada. «Pero habría que ver qué material es y dónde se ha aplicado exactamente, ya que todo son especulaciones», añaden estas fuentes.

Por otro lado, la asociación la Asociación de Instaladores de Aislamiento (AISLA), han mandado un comunicado para rechazar «los ataques» al poliuretano tras expresar en primer lugar sus condolencias por la tragedia. «Agradecemos, a su vez, la rectificación por parte de algunos expertos, entre ellos la vicepresidenta del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Valencia, y también la información proporcionada por el Libro del Edificio», afirman.

«El edificio fue construido en 2008 con una solución de fachada ventilada, y es importante aclarar que no había aislamiento de poliuretano en la cámara de la fachada ventilada del edificio siniestrado. En conclusión, son falsas las informaciones difundidas acerca de la presencia de poliuretano en este edificio y su supuesto papel como agente propagador del fuego», agregan.

En la misma línea, Salvador Puigdengolas, ingeniero industrial y exdecano del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana (COIICV), comentaba a LAS PROVINCIAS que el material del aislamiento usado con estas placas puede haber actuado como una cámara de aire facilitando la propagación y generando un efecto chimenea. En este sentido, la fachada tiene unas propiedades «que son como una camisa cuando se pega al cuerpo», es decir, se le pegan las llamas y, al hacerlo, éstas suben a toda velocidad y el incendio se extiende por toda la fachada.

No obstante, remarca que debido a la rapidísima propagación del incendio habrá que analizar cómo han influido los materiales empleados en la construcción. Puigdengolas explica que el tipo de incendio le ha recordado al de la torre Grenfell de Londres, que motivó una actualización de la normativa europea. De hecho, el cambio legislativo fue en 2019, cuando se introdujo la obligatoriedad de sectorizar las fachadas ventiladas y añadir barreras antiinciendios en los aislamientos. Es decir, todos los edificios anteriores no estaban obligados a implementar estas medidas de seguridad.

A esto se suma la meteorología, con temperaturas de 25 grados por la tarde y fuertes rachas de viento de hasta 60 kilómetros por hora (km/h), lo que complicó las labores de extinción de los bomberos. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), sopló viento de poniente todo el día en Valencia, con rachas de viento de entre 50 y 60 km/h entre las 17.00 y las 18.00 horas. De hecho en la previsión de Aemet para este jueves estaba previsto este fenómeno. Por otro lado, Emergencias anunció en X (antes Twitter) que el riesgo de incendio para este viernes es máximo en las provincias de Valencia y Alicante debido al viento.