La Guardia Civil continúa la búsqueda de un hombre con antecedentes policiales que mantuvo una cita con la joven en Manuel

El principal sospechoso de la desaparición de Marta Calvo, un joven colombiano con antecedentes policiales, limpió de forma minuciosa con lejía la vivienda donde mantuvo una cita con la joven en el pueblo de Manuel, según ha informado hoy el programa 'Espejo Público' de Antena 3.

La Guardia Civil busca intensamente a este individuo tras identificarlo con los datos que la madre de Marta facilitó a los investigadores del Grupo de Homicidios. Una cita en el pueblo de Manuel con el hombre que acababa de conocer y el mensaje con su ubicación que la joven envió a su madre a través de la aplicación de WhatsApp, antes de entrar en la vivienda del sospechoso, son las dos pistas clave de la extraña desaparición de Marta. Un grupo de agentes de la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se desplazó ayer a Valencia para reforzar la investigación.

La madre de Marta denunció la desaparición después de localizar la casa del joven que había quedado con su hija, supuestamente, en la madrugada del pasado 7 de noviembre. La mujer llegó a hablar incluso con este individuo para preguntarle dónde estaba Marta, pero el sospechoso le dijo que no conocía a ninguna joven que se llamara Marta.

Dos días después de la cita que tuvo su hija y angustiada porque Marta no respondía a las llamadas del móvil, la madre se desplazó al lugar indicado por el mensaje que había recibido, preguntó a varios vecinos si habían visto a Marta y como no pudo localizarla en el pueblo, presentó la correspondiente denuncia, según ha explicado la abuela paterna en el programa 'Espejo Público'.

Días después de la desaparición, la Guardia Civil realizó batidas en el municipio con perros adiestrados y un helicóptero, e incluso registraron la vivienda de la calle San Juan Bautista donde residía el hombre de nacionalidad colombiana que quedó con Marta. El principal sospechoso de la desaparición es un individuo de tez morena, con gafas, una pequeña barba y unos 35 años de edad. Así lo describen los vecinos que se reúnen todas las tardes en el banco de una calle en la que todos se conocen.

Tras limpiar la casa de forma minuciosa, el hombre huyó y la Guardia Civil lo busca intensamente desde entonces. Los investigadores han localizado ya su vehículo. Además del grupo de agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), el Equipo Central de Inspecciones Oculares (ECIO) del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil también se ha desplazado a Valencia para apoyar al Grupo de Homicidios de la Comandancia de Valencia.