![El edificio de Campanar, arrasado por las llamas y reducido a una mole silenciosa.](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2024/03/01/campanar-efe.jpg)
![El edificio de Campanar, arrasado por las llamas y reducido a una mole silenciosa.](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2024/03/01/campanar-efe.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Apagadas las llamas y asegurada la estabilidad del edificio. Enterradas las víctimas y con el dolor aún palpable y pendiente de superar entre los familiares. Con las más de 400 personas que se han quedado sin hogar y tratando de remontar sus vidas ahora en el edificio del Ayuntamiento en Safranar o en casas de familiares. Con la incógnita aún candente de qué paso con la diabólica fachada para que las llamas corrieran con un reguero de pólvora y sumiera la finca en un infierno que la devoró en apenas 30 minutos y acabó con la vida de una decena de personas. Esta y otras muchas son las dudas en el aire que afrontan ahora las víctimas, la administración y la justicia más de una semana después de vivir el peor incendio en un edificio de la historia negra de Valencia.
1
No hay investigación más compleja que la de un incendio. El fuego destruye o emborrona las pruebas. Un fallo eléctrico en el piso 86 desató el infierno. Eso constataron la Brigada de Homicidios y la Policía Científica. Queda por ubicar el origen exacto del fallo eléctrico. El motor de un toldo mecanizado, un enchufe situado junto a la terraza o una conducción de cables al lado del balcón son tres de las hipótesis.
2
El material aislante situado bajo la fachada ventilada fue lo más parecido a pólvora. Los vídeos demuestran cómo el edificio era una gigantesca tea en media hora. LASPROVINCIAS comprobó, con un vídeo difundido en redes sociales, cómo ardía un trozo de fachada del edificio que salió despedido a más de 200 metros. El polietileno, una sustancia que combustiona y desprende gotas incendiadas, está presente aún en la acera de la finca siniestrada con siniestros manchurrones negros. Las periciales determinarán que material hay y si hay responsabilidad de la constructora o promotora.
3
¿Cumplía el edificio las pertinentes medidas de seguridad antiincendios? ¿Por que no funcionaban dos de los cuatro ascensores?, según denunciaron los vecinos. Otro extremo a aclarar durante la investigación judicial. Un aspecto no sólo importante a la hora de fijar posibles responsabilidades penales en lo ocurrido, sino para señalar el camino a seguir por los afectados a la hora de reclamar indemnizaciones o pagos a aseguradoras.
4
Los Bomberos se jugaron mucho más que el pellejo y rescataron a no pocos vecinos. Aplicaron el protocolo que en el 99% de los siniestros salva vidas: decir a las personas rodeadas por el fuego y las llamas que se confinen en sus casas. Víctimas como la familia pereció atrapada. El suceso abre un debate sobre cómo actuar en el futuro en incendios tan atípicos como este, que avanzó de fuera a dentro, cuando lo lógico en este tipo de siniestros es que devoren todo el interior de los inmuebles para luego salir al exterior. Una ratonera para los bomberos, para las víctimas que se quedaron dentro y un laberinto insalvable para un protocolo habitualmente útil y vital.
Noticia relacionada
5
Cuando la Policía certifique el origen de las llamas, empezará otra investigación en cadena. Periciales sobre la composición de las fachadas y de las paredes internas, literlamente derretidas por el fuego ante su elevada composición de pladur. Esto último lo determinaron los propios bomberos, sorprendidos por cómo las llamas les rodearon en habitaculos estancos en los que habitualmente trabajan sin problema. El objetivo de estas diligencias ya más técnicas será determinar si hay responsabilidad penal en quienes levantaron el edificio. Constructora, promotora, arquitecto y otros especialistas de la obra civil pueden estar en el punto de mira.
6
El Tribunal Superior ya ha reclamado un juez de refuerzo para la instrucción. Fundamental para que no se eternice una investigación que puede durar años. Algo vital para que no pase como en el caso del tren de Bejís, enfangado desde hace una eternidad y con pruebas periciales pendientes desde hace más de un año y medio. Grandes causas como la de los muertos del albergue de Todolella o el de la tragedia del metro de Valencia se alargaron durante muchísimo tiempo por la extrema complejidad de una instrucción con decenas de declaraciones de testigos, periciales y pruebas técnicas que es difícil asumir por un sólo juez, ni siquiera con exclusividad para la causa.
7
Los Bomberos certificaron que no hay riesgo de derrumbe, pero hasta que no entren los arquitectos técnicos y los peritos no se podrá saber si es posible su reconstrucción o no. Esta labor durará al menos tres meses desde que se autorice a los técnicos a entrar. Y después de que estos den luz verde, entra otro momento: el de las aseguradoras y sus peritos, para determinar si el montante que se concede a los afectados permite o no levantar el edificio de nuevo. La poliza valora en algo más de 26 millones la finca siniestrada. Los afectados calculan que la operación de reconstruir sus casa será posible si se les concede al menos la mitad de esta cantidad.
8
Los más de 400 propietarios están pendientes de qué pasa con su futuro. Dónde viviran los inquilinos y qué indemnización recibirán ellos y los propietarios. ¿Se extenderá el periodo de carencia de las hipotecas? ¿Pagarán los seguros todas las indemnizaciones? El proceso legal se antoja arduo. Algunos bancos ya han iniciado esa prórroga del pago para los afectados. Queda por ver cuánto tiempo durará ese beneficio.
9
En el horizonte, la revisión anunciada por el Ayuntamiento de Valencia y el Colegio de Arquitectos de edificios que pueden tener las mismas características que el de Campanar. También el Consell tiene sobre la mesa un censo que va más allá de las fronteras de la capital y llega a toda la Comuniat. Incluso a nivel nacional. se ha extendido el debate sobre este tipo de edificios
10
Las secuelas psicológicas que padecerán las familias de los fallecidos y los supervivientes están por ver. No sólo eso: la factura que puede pasar en muchos ciudadanos por miedo ante incendios o su respuesta ante emergencias similares es también una incógnita. Esta semana lo vimos en Vigo: los ocupantes de un edificio salieron en tromba al desatarse un pequeño incendio en una vivienda. El fuego no salió al final en ningún momento del inmueble. Los Bomberos lo advierten e insisten: un desalojo apresurado o sin control puede acabar generando más víctimas que la respuesta habitualmente segura del confinamiento en una casa
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Jon Garay y Gonzalo de las Heras
Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.