Un joven se enfrenta a 14 años de cárcel por matar a un hombre de un tiro en Manises

Un tribunal popular juzga a partir de este lunes a un joven acusado de matar a un hombre de 43 años, de un tiro en el pecho, en una casa en la calle Torrent de Manises en la que criaban gallos de pelea y habían construido una pasarela para acceder a una plantación de marihuana.

Los violentos hechos ocurrieron sobre las 21 horas del 31 de mayo de 2021 en la vivienda en la que se encontraban el procesado, la víctima y otras tres personas, dos de ellas menores de edad.

El juicio está previsto que se celebre en tres sesiones (lunes, martes y miércoles) en la Ciudad de la Justicia de Valencia. El jurado popular deberá decidir si el encausado, Antonio D. H., le reprochó al fallecido, Eduardo C., la falta de algo que este último negó haber cogido en una habitación utilizada como cocina y comedor, y después le disparó a escasa distancia con una escopeta del calibre 12.

El tiro alcanzó a la víctima en el pecho y le causó la muerte de forma inmediata tras fracturarle dos costillas y provocar «el estallido de la aurícula derecha del corazón», según el escrito de acusación del fiscal.

Además, la víctima sufrió numerosas heridas en el tórax por perdigones dispersos que se incrustaron en los pulmones. Estas graves lesiones causaron el fallecimiento del hombre por «la destrucción masiva de los centros vitales cardiacos», según el informe de la autopsia.

La Fiscalía de Valencia pide 14 años de prisión para el acusado por un delito de homicidio y otros nueve meses de cárcel por tenencia ilícita de armas. También solicita la prohibición al procesado de acudir o residir en Manises durante 20 años.

El presunto homicida, que tenía 18 años de edad cuando sucedieron los hechos, ha negado hoy ser el autor del disparo mortal durante su declaración en la primera sesión del juicio. También ha manifestado que la noche del 31 de mayo de 2021 estaba en Xàtiva.

En la casa donde tuvo lugar el crimen residían la víctima, otro hombre que falleció en 2022 y dos hermanos menores (una chica y un niño) que fueron interrogados por la Policía Nacional para esclarecer los hechos. La joven, que ha declarado en el juicio mediante videoconferencia, ha identificado al acusado como el individuo que vio huir de la casa poco después de oír el disparo.

Según las investigaciones policiales, el hombre que murió de un tiro en el pecho se encargaba de cultivar las 70 plantas de marihuana que descubrieron los primeros agentes que llegaron al lugar tras ser avisados del crimen. Los gallos de pelea eran del procesado y su padre.

Tras inspeccionar la vivienda, la Policía descubrió una pasarela que habían construido en la terraza de la casa para acceder a una vivienda contigua, sin salir a la calle, donde se encontraba la plantación de cannabis.

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