Un joven mata de una puñalada a su padre tras una discusión en su piso de Meliana

Un joven de 30 años mató este jueves a su padre de 56 en su piso de Meliana tras una fuerte discusión. Los hechos ocurrieron sobre las 21:40 horas del miércoles, en el domicilio en el que se residían en la calle Santa Teresa de esta localidad de l'Horta Nord. Al parecer, padre e hijo, de nacionalidad ucraniana, se enzarzaron en una disputa y una sola puñalada bastó para que el vástago acabara con el vida de su progenitor.

Tras una llamada al 112 alertando de la situación por una persona cercana a ellos, el joven fue detenido por agentes de la Guardia Civil de Moncada en el piso y agentes de criminalística se hicieron cargo de la investigación de los hechos. Hasta el lugar del suceso se desplazó una unidad del SAMU, cuyo equipo médico solo pudo confirmar el fallecimiento del hombre, de 56 años, por arma blanca, según informó el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU). El cuerpo de la víctima fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para practicarle la autopsia.

El vecindario amaneció sorprendido por la presencia de la Guardia Civil y los medios de comunicación ya que los hechos pasaron desapercibidos en una de las zonas más tranquilas del pueblo, ubicada a las afueras. Los vecinos pasaban desconcertados por delante del patio número 16 de este vial donde tuvo lugar el parricidio. La mayoría de ellos no conocen al padre, de 56 años, ni al hijo de 30.

«Me ha dado un vuelco el corazón al enterarme», comentaba una vecina conmocionada por los hechos, «este es un barrio muy tranquilo». Ni siquiera en las fincas aledañas se enteraron del trágico suceso. «No oí nada, estaba viendo el fútbol por la noche», apuntó otro vecino.

«Vemos gente entrar y salir pero no sabemos quiénes son», señalaron dos residentes cercanos que tampoco conocen ni a la víctima ni a su presunto asesino. Otro de los testimonios recogidos señalaron que aunque «no eran conflictivos, estaban todo el día colocados porque se veía y se olía desde mi ventana».

La vecina puerta con puerta del presunto parricida explicó para este periódico que no oyó nada la noche del crimen y que solo la alertaron «las sirenas» de los cuerpos de seguridad. La joven, que reside desde hace pocos meses en esta finca, comentó que «no los conocía bien, me solía cruzar con el padre y el hijo por la escalera cuando venía de trabajar pero poco más».

Al parecer y según su testimonio, el padre y el hijo vivían solos, «no he visto a nadie más en esa casa» y, aunque advirtió de que no ha escuchado discusiones en todo este tiempo aseguró que el presunto parricida «no iba bien del todo», en referencia a posibles adicciones a la bebida u otro tipo de sustancias, sobre la que también han comentado otros residentes de la zona.

En los últimos meses se han registrado hasta tres parricidios en la comarca de l'Horta, concretamente en Aldaia y Moncada. El más reciente fue el 4 de noviembre, cuando un hombre de 49 años se entregó en el retén de la Policía Local de Aldaia, con las manos ensangrentadas, confesando que había matado a cuchilladas a su padre.

El 22 de octubre otra octogenaria fallecía degollada a manos de su hijo, que padece una enfermedad mental, en el barrio del Cristo de Aldaia. En el mes de septiembre, en Moncada, un hombre fue detenido por matar a su madre con un cúter y herir a su padre en el cuello con una arma blanca.