La jueza autoriza la toma de muestras de ADN a la manada de Burjassot

La jueza que instruye la causa de la violación grupal de Burjassot ha autorizado a la Policía la toma de muestras de ADN a los menores acusados de agredir sexualmente a dos niñas de 12 y 13 años. El objetivo es poder cotejarlas con las que recogió la Policía Científica en la casa en ruinas donde una de las víctimas asegura que fue violada por seis chicos.

Según informaron fuentes jurídicas, cinco de los presuntos agresores ya han sido informados por sus abogados del auto dictado por la jueza, mientras que el sexto varón implicado en los hechos, un joven de 18 años de edad, continúa en paradero desconocido desde que trascendió en Burjassot que la Policía lo busca para detenerlo. El sospechoso ha valorado la posibilidad de acudir a un juzgado para entregarse después de que un familiar hablara con un abogado penalista.

Como ya informó LAS PROVINCIAS, ninguno de los cinco menores prestó su consentimiento para que la Policía Científica pudiera obtener las muestras biológicas, mediante frotis bucal con un bastoncillo, durante el tiempo que permanecieron detenidos. Además, uno de los abogados ha recurrido el auto.

Los dos menores que quedaron con las niñas y que fueron identificados por las víctimas reconocieron que mantuvieron relaciones sexuales con ellas, pero afirmaron que fueron consentidas, y uno de ellos declaró que se asustó y se marchó cuando vio llegar a cinco amigos de su barrio.

En su comparecencia ante la jueza, los otros tres jóvenes arrestados por la Policía manifestaron que no estaban en la casa cuando sucedieron los hechos, y por ende, negaron su participación en la violación en grupo.

La Policía Científica recogió restos de sangre, colillas, huellas y otros vestigios tras inspeccionar de forma minuciosa el sótano y los dos colchones donde fueron violadas las niñas. Estas pruebas y las prendas de ropa que llevaban las víctimas en el momento de las agresiones sexuales fueron trasladadas al laboratorio para analizarlas.

Las dos víctimas se habían conocido una semana antes a través de Instagram, mientras que los cinco detenidos son amigos y tienen entre 15 y 17 años de edad. Cuatro de ellos no cuentan con antecedentes policiales y uno fue arrestado una vez por un robo con violencia.

Aunque las niñas incurrieron en contradicciones sobre el posible consentimiento que una de ellas habría dado para mantener relaciones sexuales con dos de los jóvenes, la Policía Nacional y la Fiscalía consideran que hay pruebas para acusar a cuatro menores de la violación en grupo y para atribuir a otro la agresión sexual que denunció la segunda niña.

El palacete en ruinas donde ocurrieron los hechos tiene dos plantas y se encuentra en un estado ruinoso con riesgo de derrumbe. Aunque la parcela se encuentra vallada, pandillas de jóvenes saltan la verja del parque del Mirador para hacer botellón en las habitaciones de la casa abandonada.

• Temas
• Delitos Sexuales
• Caso la Manada
• Policía Nacional
• Burjassot
• Sucesos
• Abusos sexuales en la Comunitat Valenciana