La madre de Marta Calvo: «Es muy triste que nadie del Gobierno me haya recibido»

Hoy se cumplen dos años de la triste desaparición de Marta Calvo con 25 años. Fue el 7 de noviembre de 2019 el día en que se citó en Manuel con el sospechoso de su asesinato, Jorge Ignacio P. J. Y coincidiendo con el aniversario, su madre, Marisol Burón, está dispuesta a cambiar la ley y endurecer las penas para quienes, como Jorge, se deshacen de cadáveres. Con la iniciativa legislativa popular que el viernes presentó en el Congreso de los Diputados.

Sin embargo, como manifestó a ABC, Burón lamentó el desplante de PSOE y Podemos, partidos que no la recibieron en la Cámara Baja para, al menos, escucharla y arroparla. Sí lo hicieron representantes del Partido Popular, Ciudadanos y Vox. «El jueves me llamó un representante del PSOE, por eso pensé que estarían hoy en el Congreso. Es triste que nadie del Gobierno haya tenido la valentía para recibirme», lamentó la progenitora a las puertas del Congreso.

Lo que pide la madre con su iniciativa legislativa popular es tipificar como delito la ocultación intencionada de un cuerpo después de cometer un crimen. Y según expuso, se llevó del encuentro un compromiso político. «Me han prometido que van a hacer todo lo necesario para que ocultar el cadáver después de un homicidio no salga gratis. Ellos, antes que políticos, son padres, y entienden mi dolor. Necesitamos proteger a nuestros hijos», resumió. Estuvo acompañada por Antonio del Castillo, padre de Marta del Castillo, quien ha vivido un infierno semejante al de Burón.

La madre de Marta dijo sentirse «satisfecha» por ser escuchada por algunos representantes políticos, pero disgustada por el desplante de socialistas y podemitas.

Paralelamente a la presentación de la iniciativa legislativa, se ha puesto en marcha una campaña: 'Marta Calvo Burón. ¿Mis derechos dónde están'. Cualquiera puede apoyar la iniciativa legislativa de la madre de la víctima con firmas a través de www.pormartacalvoburon.com.

El cambio que plantea es la tipificación del delito de ocultación de cadáver «cuando el autor de los hechos se niega a colaborar o comunicar la ubicación y pueda probarse su autoría» por otros medios incriminatorios. La extensión de la pena propuesta es de entre seis y diez años de cárcel, como un delito autónomo y sin perjuicio de la condena que pudiera imponerse por homicidio.